A un marroquí acusado de intentar matar de una puñalada a un compatriota con el que tuvo una riña
La Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Almería ha impuesto siete años de prisión a un marroquí acusado de intentar matar de una puñalada a un compatriota con el que tuvo una riña.
La sentencia declara probado que el acusado H.B. inició una discusión con el perjudicado sobre las 15:00 horas del 11 de noviembre de 2021 en la Plaza Andalucía de Roquetas de Mar
Según el fallo, se marchó del lugar para regresar poco después con una porra y un cuchillo, así como que se abalanzó sobre la víctima con “intención de acabar con su vida”.
De esta forma, primero golpeó al otro hombre con la porra y, cuando éste levantó los brazos para defenderse, le clavó el cuchillo en un costado.
Tras varios intentos, el agredido cayó al suelo mientras “sangraba abundantemente” y, ante lo ocurrido, otro hombre intentó quitarle el cuchillo al acusado, lo que provocó que este último se hiciese un corte en una mano.
Finalmente, el procesado pudo ser reducido por las personas que se encontraban en el lugar.
El perjudicado sufrió lesiones que “supusieron un riesgo para su vida, comprometiendo la misma por el neumotórax que le produjo la herida que le comprimía el pulmón izquierdo, que hicieron precisa la atención médica urgente”.
Asimismo, el hombre que intentó quitarle el cuchillo al acusado sufrió una herida inciso contusa en la palma de la mano izquierda de 4 centímetros de longitud.
Por estos hechos, H.B. ha sido condenado por un delito de homicidio en grado de tentativa a siete años de prisión, y además se le impone una orden de alejamiento de 500 metros durante diez años.
Aunque la víctima no acudió a la vista oral, los magistrados han valorado especialmente una grabación de la agresión difundida por las redes sociales, en cuyos fotogramas “se reconoció el acusado en el plenario, y que permite a este Tribunal una visión directa de lo acontecido”.
A ello, se suma el parte de lesiones que sufrió el perjudicado, emitido por el médico de urgencias, así como el informe del médico forense que examinó posteriormente las heridas.
“Examinada la grabación que fue difundida por las redes (...) puede verse como efectivamente el acusado portando el cuchillo en una mano y una porra en otra acomete a (la víctima) una y otra vez con ambos objetos, mientras éste tan solo trata de quitárselo de encima con las manos y con los pies”.
Todo ello, “tratando de alejarlo de él, mientras otras personas tratan de sujetarlo, llegando en un momento dado a alcanzarle con el cuchillo en el costado”, según abundan en los fundamentos del fallo los magistrados.