UPA-Andalucía, Federación de Regantes de Almería (Feral) y la Asociación de Regantes de Andalucía (Areda) han reclamado para la provincia "más agua" procedente del trasvase del Negratín, la conexión de la presa granadina de Rules con la comarca del Poniente almeriense y que la Cuenca Mediterránea Andaluza asuma los gastos de explotación de las desaladoras.
Así lo han indicado las tres organizaciones en una rueda de prensa convocada para explicar las alegaciones formuladas a la revisión del Plan Hidrológico, cuyo plazo de exposición pública culmina este jueves, y en la que le piden al organismo de cuenca que active un plan de inversiones para facilitar la interconexión de diferentes sistemas de explotación y financiar proyectos para la modernización del 100 por ciento de los regadíos.
En concreto, han demandando que la comarca del Almanzora reciba más agua del Trasvase del Negratín mediante un incremento de la dotación actual, que pasaría de 50 a 75 hectómetros cúbicos anuales y lo han justificado en la situación "crítica" que vienen padeciendo los regantes del Almanzora, "cuya actividad agraria se encuentra seriamente amenazada por la falta de garantías de futuro en los recursos hídricos", según han dicho.
Las tres organizaciones han estimado, al hilo de esto, que el incremento de aportes procedentes del Negratín sería "perfectamente asumible" para la cuenca del Guadalquivir, ya que los 75 hectómetros cúbicos representan "tan solo el 0,36 por ciento de sus recursos totales".
Dentro del mismo plan de inversiones para interconexión de cuencas, UPA-Andalucía, Feral y Areda han demandado la construcción de conducciones que permitan aprovechar en el Poniente almeriense aguas de la presa de Rules, una vez ejecutadas las obras de canalización necesarias para el desarrollo y modernización de los regadíos y satisfechas todas las demandas de la zona.
"Con esta medida se contribuiría a mejorar la situación de los acuíferos del Poniente, que desde hace tiempo muestran síntomas de agotamiento y se garantizaría el futuro de uno de los modelos agrícolas más eficientes y rentables de toda Andalucía, que genera el 25 por ciento de la producción final agraria y miles de empleos en nuestra comunidad", según han remarcado
DESALACIÓN Y REUTILIZACIÓN
A juicio de las tres organizaciones, el nuevo Plan Hidrológico para la Cuenca Mediterránea Andaluza debe contemplar la desalación como "vía prioritaria" para generar recursos hídricos y que el organismo de cuenca pague una parte de los gastos de explotación de las plantas desaladoras, "de modo que se rebaje la presión económica sobre los regantes y se consiga un precio justo para el agua desalada".
"La desalación se completaría con el fomento de la reutilización de aguas regeneradas, en cumplimiento de los compromisos y obligaciones que refleja la legislación local, autonómica y estatal en materia de aguas y que hasta ahora se han ignorado por las administraciones competentes en la gran mayoría de los casos", han explicado para señalar como "de vital importancia" el que se complete la modernización del 100 por ciento de los regadíos para "incidir en el ahorro de agua que permita garantizar las dotaciones existentes y atender demandas futuras".
REVISIÓN Y ORDENACIÓN
Entre las alegaciones, figura, asimismo, la solicitud de puesta en marcha de un proceso "urgente" de revisión, ordenación y regularización de las extracciones basado en las conclusiones de un estudio geológico "que determine la situación real en que se encuentran las diferentes masas de aguas subterráneas de la provincia".
Según han concluido las tres organizaciones, dicha revisión "puede demostrar que en ciertos casos hay recursos disponibles para atender algunas demandas muy localizadas, con lo que se podría desbloquear la tramitación de concesiones que llevan paralizadas desde hace muchos años en una situación tremendamente injusta y que es consecuencia de la dejadez y de la falta de coherencia".