El Ayuntamiento de Adra (Almería) ha solicitado al Juzgado de lo Contencioso-administrativo número 3 de Almería autorización judicial para poder acceder a las instalaciones del antiguo hotel Mirador de Adra, un complejo turístico de cuatro estrellas en estado de abandono, con el fin de poder tasar su valor y sacarlo posteriormente a subasta pública para reactivar este equipamiento turístico.

Fuentes del Consistorio abderitano han explicado a Europa Press que la solicitud de autorización se presentó el pasado 14 de julio, de modo que, a la espera de la decisión del juez, los técnicos municipales trabajan en paralelo en la detección de deficiencias en el inmueble para su corrección por parte de los nuevos propietarios a partir de un estudio de rehabilitación.

Con esta acción, el Ayuntamiento espera obtener una tasación del inmueble acorde con su valor real de mercado actualmente. Así, será el nuevo propietario el que tendrá que ejecutar las actuaciones de rehabilitación necesarias, atendiendo a las condiciones y plazos de ejecución establecidos por el Ayuntamiento, así como asumir las cargas y gravámenes que pesen sobre el inmueble, en caso de que existieran.

El Ayuntamiento de Adra realizó bajo autorización judicial durante el pasado año, de manera subsidiaria y por inactividad del propietario, labores de limpieza del jardín, el cerramiento de las instalaciones y la reparación de los desperfectos de la fachada, por motivos de seguridad, salubridad y ornato público del inmueble de referencia.

Con estas gestiones, el Consistorio presidido por el popular Manuel Cortés sigue adelante los trámites establecidos en la ordenanza aprobada el pasado año que "abriría la puerta a la nueva reapertura el hotel y, en consecuencia, a dar posibilidades turísticas y de empleo al municipio".

El equipo de gobierno impulsó una ordenanza reguladora del registro municipal de solares y edificaciones ruinosas de uso turístico que entró en vigor el 27 de febrero con la que se dio "mayor celeridad" al proceso para reactivar el hotel.

Así, en caso de que los propietarios del edificio del hotel no realizaran las labores de rehabilitación y mantenimiento exigidas en el informe emitido por los técnicos municipales, el edificio pasará a formar parte del registro de solares y edificaciones ruinosas de uso turístico, lo que podría desembocar en la venta forzosa del inmueble mediante la convocatoria de un concurso público.