La Concejalía de Participación Ciudadana, ante la situación económica que atraviesa el Ayuntamiento y la falta de partida presupuestaria para la puesta en funcionamiento de la figura del Defensor del Ciudadano, estudia la puesta en marcha, “en la medida que lo permita la disponibilidad económica”, advierte el responsable del área, Alfonso Candón, de la Oficina del Defensor del Ciudadano con recursos propios, es decir, “algún compañero del Ayuntamiento que reúna los requisitos de idoneidad y capacitación, y sea una persona familiarizada con estos temas, que permita poner en marcha en principio la oficina para dar el servicio al ciudadano”.
Actualmente estos servicios se vienen dando “con un cierto nivel de calidad, con regularidad y dando respuesta a las quejas y demandas ciudadanas por la Comisión de Defensa de la Ciudadanía que se reúne cada tres meses”, indica Candón.
“Si no hay consignación presupuestaria, no se puede acometer algo que supone tocar el presupuesto en materia de personal y generar una estructura con un equipamiento”, insiste el concejal popular que recuerda que el Defensor de Ciudadano “era un compromiso que ya venía establecido cuando entramos en el gobierno en un reglamento de participación ciudadana, lo que comprometía al gobierno siguiente, algo que nos es lógico porque cuando entramos no había ninguna partida asignada, ninguna estructura organizada, sólo en el reglamento se decía que a partir de 2007 se pondría en funcionamiento”.
Candón asegura que “con voluntad y trabajo serio, estructurado, vamos a intentar poner en funcionamiento una figura intermedia mientras no tengamos lo que es la estructura para crear el Defensor del Ciudadano”.