Las repetidas olas de calor también empiezan a tener impacto en el turismo. Los viajeros tendrán cada vez más en cuenta la nueva realidad climática a la hora de planificar sus vacaciones.
Los umbrales históricos de temperaturas alcanzados durante este verano, sobre todo en Andalucía, han tenido y van a tener un efecto en las decisiones de los turistas.
Así lo confirma una encuesta de Passport Photo Online, que asegura que el 77% de los turistas ha declarado tener muy en cuenta este aspecto a la hora de planear sus próximas vacaciones.
Los efectos del calor
Uno de los graves problemas que acarrean las olas de calor son los problemas de salud que pueden aparecer. El 48% de los encuestados aseguró haber sufrido deshidratación, agotamiento y dolores de cabeza durante sus vacaciones debido a las altas temperaturas.
Esto también ha influido en el aumento de gastos (por ejemplo, de botellas de agua), en las limitaciones de las actividades al aire libre o en los retrasos y cancelaciones en el transporte.
Por ello, durante el pasado verano, los turistas tuvieron que cambiar sus previsiones. Según la encuesta, el 27% tuvo que reorganizar sus quehaceres diarios, el 26% optó por alojamientos con instalaciones climatizadas y el 25% cambió los medios de transporte para reducir la exposición al calor.
Todo esto ha llevado, según la Comisión Europea de Viajes (ETC), a que los planes de viajes al Mediterráneo hayan caído un 10% entre junio y noviembre en comparación con el mismo periodo del año pasado.