Presupuestos de 2010, ¿puro teatro?

El día 3 de septiembre en un Pleno extraordinario que debería ser el más importante del año, se aprobaron los Presupuestos de El Puerto de Santa María para 2010. Lo primero que salta a la vista es que aprobar unos presupuestos a los casi nueve meses de iniciado el ejercicio es un absurdo fuera de toda lógica; parece un embarazo en toda regla.
Cuando deberíamos estar hablando de los presupuestos para 2011, el Gobierno local ofrece a la Corporación y a toda la ciudadanía un debate esquizofrénico: opinar sobre cuáles deben ser los ingresos y gastos durante 2010, cuando la mayor parte de los mismos ya están realizados. En el Foro nos preguntamos el por qué de esta escenificación, cuando ya nada tiene marcha atrás. Con actuaciones de este tipo, es natural que los ciudadanos cada vez se alejen más de las urnas y desprecien la labor de los políticos.
En segundo lugar, es también llamativa y muy significativa la falta de participación de las organizaciones sociales en la elaboración de dichos presupuestos. Incluso a la oposición, también representante de muchos ciudadanos, se le ha dificultado su labor de control, con el poco tiempo concedido para el estudio de los documentos y además en un mes que tradicionalmente es de vacaciones.
Todo indica que para el equipo de Gobierno era un simple trámite y que le importaba poco la opinión de la oposición y de la ciudadanía. Tenían asegurada la aprobación, apoyados en un tránsfuga (vergüenza de la política portuense) y en un especialista en vender las mismas acciones varias veces y en dar a entender que se han comenzado obras que tardarán años en ver la luz, si es que la llegan a ver algún día. Esto en política se llama aplicar el rodillo, despreciando a la oposición y a la participación ciudadana.
En tercer lugar, centrándonos en el área de Bienestar Social, se nos quiere vender que el equipo de Gobierno es sensible a las necesidades por las que están pasando muchos ciudadanos a causa de la crisis económica y, por eso, aumentan significativamente el presupuesto de dicha concejalía. El aumento del presupuesto por parte del Ayuntamiento en Bienestar Social es ficticio porque están incluidas en el mismo las aportaciones de los gobiernos Central y Autonómico por los conceptos de Ley de Dependencia y Ayuda a Domicilio, en los cuales el Gobierno local es un simple transmisor. Si descontamos estas partidas, el presupuesto de Bienestar Social no ha aumentado sino que ha disminuido.
El importante aumento de la partida destinada a atender las situaciones concretas de necesidad o emergencia, del cual nos alegramos sinceramente, se ha conseguido a base de recortar 91.200 euros de las subvenciones para otros programas de prevención y atención a excluidos que llevan a cabo distintas asociaciones, de la supresión de un convenio de ayuda internacional, disminución de otras partidas como realojos, escuela infantil municipal, etc. Podían haber recortado sus sueldos y los de los cargos de confianza.
En el Foro Social pensamos que las emergencias necesitan ser atendidas y así lo hemos pedido en numerosas ocasiones, pero también, y no con menor esfuerzo, los programas de prevención y atención a personas en riesgo de exclusión. Hacer sólo lo primero se llama paternalismo porque no ayuda a crecer a las personas; aplicado a la política se podría definir como clientelismo, ya que las elecciones municipales están en el horizonte.
Señores y señoras del equipo de Gobierno, cuando de verdad quieran elaborar unos Presupuestos Participativos y atender prioritariamente a los graves problemas de muchos de los ciudadanos desfavorecidos de El Puerto, nos encontrarán dispuestos a arrimar el hombro. Si, por el contrario, lo que pretenden es montar escenificaciones inútiles, seguiremos denunciando lo que nos parece injusto.