De Bernardo sella el hermanamiento entre San Fernando y Guanajuato

La apretada semana vivida por el alcalde isleño, Manuel María de Bernardo, en México culminó en la noche del pasado viernes con el acto de hermanamiento entre San Fernando y la localidad mexicana de Guanajuato. Un acto que ha servido para promocionar y ensalzar la celebración del Bicentenario isleño y de la Independencia mexicana.

De Bernardo, que ha estado acompañado durante todo su periplo en México por el delegado de Presidencia, Francisco Romero, formalizó con el alcalde de Guanajuato, Nicéforo Guerrero Reynoso, el hermanamiento con la entrega de un pergamino por parte del propio Guerrero Reynoso al primer edil isleño, mientras que éste le obsequió con el grabado del artista José Usero que reproduce los cinco edificios parlamentarios de San Fernando que conforman el eje principal de la ruta de las Cortes de 1810: Real Teatro de las Cortes, iglesia Mayor, Ayuntamiento, colegio Compañía de María y la iglesia del Carmen.

El acto tendrá su réplica en La Isla el próximo mes de febrero de 2011. Señalar además que el evento acudió también el gobernador del Estado de Guanajuato, Juan Manuel Oliva Ramírez, quien el viernes distinguió a San Fernando con el reconocimiento de Visitantes Distinguidos.

Discurso

De Bernardo explicó que “San Fernando es cuna de la libertad, del Parlamentarismo y la democracia. En Guanajuato nació la independencia y la lucha por la libertad del pueblo mexicano. En Guanajuato germinó el grito de independencia contra el Antiguo Régimen, el mismo que nuestros decretos abolieron considerando a los súbditos, incluidos los de América, ciudadanos”.

Afirmó que las dos ciudades “tienen un sentido fundacional y regenerador. Las dos contribuyeron, con esfuerzo, entrega, sacrificio, ilusión y esperanza a derribar el Antiguo Régimen y a dar paso a un nuevo tiempo. Las dos, al fin y a la postre, sentaron las bases de un nuevo concepto de Estado bajo los principios de la libertad, la igualdad y la justicia. Principios que requieren de nuestro permanente cuidado porque nadie dijo que el camino de la libertad fuera fácil pero es el camino más hermoso y requisito inexcusable para la felicidad de las personas y el entendimiento entre los pueblos”.

Dijo que se hermanaban “dos grandes pueblos que saben respetar y poner en valor su legado histórico y cultural y que miran al futuro con ilusión y con ganas de ser protagonistas de ese nuevo tiempo que estamos construyendo”. “Estoy seguro -añadió- de que nuestro Hermanamiento será otro medio, otra herramienta, para contribuir al bienestar social y al progreso colectivo, desde la Libertad”.

Nicéforo Guerrero Reynoso dijo en su intervención que “hermanar dos ciudades no solo es un acto social, sino sobre todo una responsabilidad histórica que inicia con ello, una serie de intercambios políticos y económicos, y en donde las poblaciones de ambas ciudades deben intercambiar ideas y formas de ser, para identificarse y así lograr estructurar proyectos comunes que trasciendan en el tiempo”.

Agradecimientos

Por último, Manuel María de Bernardo tuvo palabras de agradecimiento a todos los que han apoyado desde el principio este hermanamiento y han colaborado con él como son los integrantes de la Comisión Local del Bicentenario de las Cortes de 1810; la Comisión Nacional y el Consorcio para la Conmemoración del II Centenario de la Constitución de 1812, la Corporación municipal de San Fernando, el Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación y la embajada de España en México. Reconoció también el trabajo de la Comisión de Ciudades Hermanas y agradeció la labor desempeñada por Leticia Pico de Coaña Suárez, primera secretaria de la embajada de España, durante el programa de la delegación isleña.