Desesperados por el retraso en Residencial Martinete

Si hace unos días los que protestaron fueron los adjudicatarios del Residencial Los Olivos, situado en la Calle Obispo Cirarda y Tío Juanes, ahora los que protestan son los del Conjunto Residencial Martinete, una promoción de VPO en régimen de alquiler.Todo el problema se inicia justo cuando los adjudicatarios reciben una buena noticia, en julio de 2009, al ser los agraciados de las 166 viviendas que Emuvijesa había promovido en régimen de alquiler, repartidas en tres promociones. Fue entonces cuando, relatan los vecinos se les dijo que “para finales de diciembre de 2009 nos entregarían las llaves, pero fueron pasando los meses y nada”.Desde entonces, afirman, fueron “dándonos fechas cada vez que íbamos de uno en uno a informarnos, para mayo, para finales de junio, para octubre....Y seguimos sin las llaves y sin ninguna información”.Como medida de presión, las 88 familias, “cada una con unos problemas determinados, pero todos ellas con unas necesidades muy importantes y desesperantes ya”, colocaron el pasado sábado unas pancartas que desaparecieron días después, tras lo cual han convocado hoy una reunión para decidir qué medidas tomar. No descartan tomar “medidas drásticas”, reseñan.el ayuntamientoDesde el Ayuntamiento, el delegado municipal de Vivienda, Antonio Fernández Ortega, afirma que el problema que tienen estos vecinos “de una promoción de integración social, en la que no están pagando nada, a diferencia de los afectados en Los Olivos, es el mismo, la falta de finalización de una calle, que depende de Urbanismo”.Tal es así que el edil asegura que las viviendas están listas para ser entregadas, pero el retraso “no es culpa de Emuvijesa ni de Vivienda”, que aún no ha terminado un vial “en el que tengo entendido que iba a comenzar a trabajar hoy -por ayer-”, tras alcanzar un acuerdo económico para solventar una paralización motivada “por impago”, y del que depende que “tengamos la licencia de primera ocupación”, subraya Fernández.Mientras los trabajos se retoman y concluyen, los adjudicatarios -que han sido citados para la próxima semana según el delegado- ponen de manifiesto “los daños anímicos y materiales” que están soportando, con gente que se ha visto obligada a vivir en garajes, con familiares o con contratos de alquiler desorbitados”.“¿Qué credibilidad pueden tener al hablar de VPO si no solucionan los problemas?”, dicen.