El próximo 31 de diciembre finaliza el plazo establecido por el Gobierno para solicitar las ayudas familiares en favor de los recién nacidos, el conocido popularmente como ‘cheque-bebé’, que reportaba a cada reclamante 2.500 euros. La noticia, junto a la situación de crisis y reducción generalizada de recursos económicos, ha llevado a que algunas mujeres, en el periodo final de su embarazo, estén intentando adelantar el parto, de manera que sus bebés nazcan dentro del plazo marcado por el Gobierno y puedan recibir la importante ayuda económica. La respuesta de la Delegación Provincial de Salud ha sido categórica y tajante, al responder a las supuestas peticiones que sólo la naturaleza puede decidir la suerte de las mujeres que está previsto den a luz entre el 25 de diciembre y el 6 de enero próximo. Entre otras cosas porque provocar un parto puede causar problemas al bebé. Sin embargo, y pese a las advertencias médicas, algunas madres han recurrido a internet para recibir consejos de cara a adelantar el parto con tal de asegurarse el adelanto del nacimiento de su bebé. La noticia, de por sí, causa un terrible espanto, sobre todo desde el momento en que pueda anteponerse una cuestión económica a la salud de un ser humano. No se traen niños al mundo pensando en una ayuda económica, entre otras cosas porque nunca las hubo hasta el invento electoralista de Rodríguez Zapatero.