Los vecinos de Luis Caballero tuvieron que esperar hasta la dos de la tarde de ayer aproximadamente para que Apemsa, en colaboración con operarios de la empresa Suralmaq, diera solución al problema de inundaciones que comenzó entre las nueve o las diez de la noche del pasado jueves, indicando los vecinos que en todo momento se avisó a la entidad municipal desde primera hora, a pesar de que no se actuara hasta mucho después, casi más bien tarde, puesto que el agua estuvo a punto de entrar en algunos portales de los bloques de vivienda de este complejo residencial, peligrando los contadores de la luz.
Así, los vecinos que informan a este medio del problema aseguran que, en condiciones normales, e incluso debido a las últimas obras que se realizaron en la zona, en principio no debería haber problema y de hecho aunque llueva, como ha ocurrido a lo largo del invierno, no se han producido ninguna inundación, por lo que entienden que habría un atasco en otro lugar del colector al que van a parar no sólo las aguas pluviales del barrio si no también las fecales, provocando también por tanto un mal olor permanente en el barrio que era casi imposible soportar.
A primera hora de la mañana de ayer, al darse cuenta de que no se había intervenido en el barrio, varios vecinos volvieron a contactar con los partidos políticos e incluso con Apemsa y el Ayuntamiento, que hasta que no actuó el edil de Mantenimiento Urbano, Alfonso Candón, que también fue puesto en alerta por el concejal de Izquierda Unida José Manuel Vela, no se arregló el problema.
Con todo, fueron muchas horas en ascuas y de angustia de los vecinos que, impotentes, asistían a la crecida del agua y el asombro no sólo de los propios residentes de Luis Caballero sino a todos los ciudadanos que se acercaron en la jornada de ayer al centro de salud Pinillo Chico o a la farmacia cercana. Sin ir más lejos, muchas personas mayores o con movilidad reducida tuvieron complicaciones para poder acudir a la farmacia o acceder a otros comercios de la zona, pero lo peor llegó para los vecinos residentes de los ocho o diez portales más afectados por las inundaciones, porque ni se podía entrar ni salir, debido a la cantidad de agua acumulada. Además, los denunciantes aseguran que por la mañana temprano, a la hora de la salida para los trabajos y los colegios, siendo complicado para muchos poder montarse en sus vehículos.
Candón acudió a Luis Caballero a lo largo de la mañana en varias ocasiones, comprobando, alrededor de las once, que un camión de Apemsa con tres operarios estaba trabajando para buscar el atasco y evitar que el agua siguiera creciendo, puesto que continuó lloviendo e incluso con bastante intensidad, que era el temor de los vecinos y afectados, que la lluvia siguiera cometiendo estragos, puesto que a lo largo de la mañaa tan sólo se pudo aparcar en la mitad de la plaza Tula Ruiz Golluri, con el inconveniente para los pacientes que acudieron al ambulatorio.
A pesar del susto y de la angustia, el edil popular informaba, pasadas las dos de la tarde, que los operarios de Suralmaq, en apoyo a Apemsa, que estaban trabajando desde las doce aproximadamente, pudieron desatascar varios pozos, que están unidos al colector que llega de El Tomillar, por lo que poco después el problema había acabado. Reseñar que el portavoz de la plataforma de la Zona Norte, Enrique Valle, que pasaba por el lugar, también medió para que se diera una solución a este problema.
Por su lado, IP recuerda al alcalde, Enrique Moresco, las carencias que sufren barrios como el Poblado de Doña Blanca o Las Nieves. Y es que, indican que el primer edil asegura que “no ha habido complicaciones de relevancia”, en cuanto a las lluvias, lo que provoca indignación en IP, recordando el informe de Medio Ambiente acerca del PGOU, que asegura que la red de alcantarillado “es una red de riesgo grave de inundación”, subrayando peligro en estos barrios citados. “Exigimos que, lejos de mirar hacia otro lado, se actúe en estas zonas afectadas garantizando la perfecta evacuación de las aguas”.