El Ayuntamiento de Vejer de la Frontera celebró ayer el sorteo de las Hazas de la Suerte, unas tierras de labor que se sortean cada cuatro años entre los vecinos de la localidad que tienen la consideración por ley de propiedad comunal y pertenecen al pueblo desde el siglo XIII.

Coincidiendo con el sorteo de la Lotería de Navidad, y entre polvorones y copas de anís, el Nuevo Teatro del municipio se abrió ocasionalmente para acoger un “formidable” sorteo que ha repartido 1.157.280 euros entre 232 familias de Vejer, de las 2.410 que entraban en el mismo, según explicó el alcalde vejeriego, Antonio Jesús Verdú, quien precisó que lo que recae entre cada agraciado es la renta económica que generan las tierras, organizadas por “caballerías”, que oscilan entre los 3.000 y los 6.000 euros.

Subrayó que como novedad, la Junta de Hazas ha decidido que se leyera el nombre “tanto del cabeza de familia varón como de la mujer, ya que antes sólo se leía el del hombre”.

Además, los diez vecinos con mayor edad del municipio, de entre 102 y 95 años, han sido agraciados con Hazas de la Suerte sin entrar en el sorteo.

Esta actividad, “única en España” -junto a la que se celebró el pasado viernes día 19 en Barbate- fue instaurada en 1288 por el rey Sancho IV, quién ordenó repartir tierras entre los vecinos para que se asentasen en este núcleo defensivo contra las invasiones del norte de Marruecos y el Reino de Granada.

Las Hazas de Suerte tienen la consideración por ley de propiedad comunal y su administración está en manos de un grupo de vecinos elegidos al efecto y que constituyen, junto con la Corporación Municipal, la llamada Junta de Hazas. El primer reglamento data de 1886 y el último del año 2006.