Virgen de La Caridad supedita su futuro a Nueva Rumasa

Los socios de la cooperativa Virgen de la Caridad se habían mantenido en un discreto segundo plano desde que Nueva Rumasa anunció que presentaba concurso de acreedores, pese a saber que esta situación les iba a acabar salpicando, sin embargo, la “ruina” a la que asegura que les ha arrastrado la empresa de la familia Ruiz-Mateos desde que en 2009 les comprase el cien por cien de bodegas Caydsa es tal que no están dispuestos a quedarse de brazos cruzados. Así lo denunció ayer la nueva junta rectora constituida a finales de año, que reprochó al anterior equipo que realizase una operación de tal calibre “sin las garantías debidas ante posibles impagos”, pues el acuerdo incluía la venta de Caydsa por 12 millones de euros a pagar en 10 años sin intereses y a razón de 25.000 euros semanales.

Ahora, al ver que se han cumplido sus peores presagios, afrontan una “falta de liquidez total”, como advirtió el presidente de la cooperativa, Juan Juez Sarmiento, de ahí que para el próximo jueves ya hayan convocado una asamblea informativa en la que deberán ser los socios -son casi 700- “los que tomen una decisión”, un día después de que mantengan una nueva reunión con Alfonso Ruiz Mateos, donde les pondrá sobre la mesa una “posible solución” a este túnel “a través de un fondo de capital de riesgo” encaminado a “salvar” al grupo. No obstante, los cooperativistas no terminan de ver demasiado color a esta última propuesta, de ahí que ayer mismo avisaran a sus socios para notificarles la próxima asamblea, en la que someterán a votación cualquiera de los pasos que tengan que dar.

En una rueda de prensa celebrada en las instalaciones de la cooperativa, visiblemente nerviosos y preocupados, los representantes de la junta rectora alertaron que desde noviembre “no cobramos nada”, después de que Nueva Rumasa haya pospuesto pagarés que tenía pendientes de pago, de manera que a día de hoy, según cifraron, el grupo empresarial tiene con ellos una deuda no atendida de 893.000 euros de la cosecha de 2009, a la que hay que sumar otros 809.000 de deuda vencida y no atendida. A ello hay que sumar los 11.400.000 de la venta de Caydsa, un pago pendiente que, en cualquier caso, no ha vencido, dado que el acuerdo suscrito lo fraccionaba en una década y sin intereses, de manera que hasta ahora sólo han cobrado 600.000 euros de la operación realizada en 2009.

Tal y como están las cosas, los socios se temen lo peor y cada ven ven el túnel más oscuro. “Vendimos para sanear las cuentas y ahora estamos sin dinero, con cuentas impagadas y con los bancos llamándonos todos los días; ya ni siquiera podemos labrar nuestros campos porque los proveedores no nos proporcionan productos fitosanitarios porque no les pagamos; ahora mismo somos casi 700 cooperativistas abocados al desastre”, lamentan.

Desde diciembre el contacto con la familia Ruiz-Mateos “permanente”
El presidente de la cooperativa Virgen de la Caridad, Juan Juez Sarmiento, dejó claro ayer que desde que en diciembre constituyeran la nueva junta rectora han tenido contacto “permanente” con la familia Ruiz-Mateos, manteniendo reuniones en Madrid, Jerez e incluso en Sanlúcar. Sin embargo, lamentaron que “siempre nos hagan propuestas inaceptables” y que, por tanto, no son acordes a la delicada situación económica que atraviesan. Ahora, los cooperativistas cruzan los dedos para que la “posible solución” , como así les aseguraron ayer, llegue el próximo miércoles con el planteamiento que les ponga sobre la mesa Alfonso Ruiz Mateos.