La primera ministra se centró en "las fuertes preocupaciones del sector agrícola nacional en el contexto del acuerdo UE-Mercosur"
La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, se reunió este viernes con la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, para hablar de la recién estrenada legislatura y abordar asuntos como las inquietudes del sector agrícola de Italia por el acuerdo entre la Unión Europea y Mercosur.
La primera ministra se centró en "las fuertes preocupaciones del sector agrícola nacional en el contexto del acuerdo UE-Mercosur", así como en "las perspectivas del sector del automóvil en el contexto del proceso de transición medioambiental", indicó el Gobierno italiano en un comunicado.
El objetivo del encuentro entre la mandataria italiana, que se encontraba en Bruselas tras asistir el jueves a una cumbre europea, era "un primer intercambio de puntos de vista" con Von der Leyen tras el inicio del nuevo Ejecutivo europeo.
La charla abordó "las prioridades de acción del nuevo ciclo institucional de la UE, empezando por el relanzamiento del papel y la competitividad de la Unión Europea en el mundo", según el mismo comunicado.
La UE y Mercosur acordaron a principios de diciembre después de 25 años de negociaciones al pacto de asociación con Mercosur, en el que participan Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay, que aspira a crear la mayor zona de libre comercio del mundo.
Por otra parte, en el encuentro de este viernes Von der Leyen y Meloni hablaron sobre migración.
"También se prestó especial atención a la política migratoria europea, haciendo un balance de los resultados alcanzados y de lo que aún queda por hacer para disponer de herramientas eficaces para gestionar el fenómeno migratorio", añade la nota.
La mano dura contra la inmigración irregular fue una de las promesas de Meloni para llegar al Gobierno y sus políticas en el ámbito migratorio han dado frutos, con una reducción importante de las llegadas en lugares como la isla de Lampedusa.
Su idea de crear en Albania dos centros desde los que repatriar rápidamente a los inmigrantes rescatados en el mar que no tengan derecho al asilo ha suscitado la atención de la UE, que ahora estudia la posibilidad de seguir ese ejemplo para acelerar los retornos.