La
Plataforma del Voluntariado Social de Sevilla nació como una iniciativa de siete entidades que compartían un objetivo común:
coordinar y fortalecer la acción voluntaria en la ciudad. Con
casi cuatro décadas a sus espaldas, aglutinan sus esfuerzos para canalizar la solidaridad de sus
voluntarios, el nexo de unión de su trabajo.
En 1987, surgió la necesidad de
organizar la labor de los voluntarios en Sevilla, dando origen a una plataforma que unió a
diversas entidades en torno a un mismo fin:
potenciar el desarrollo y la coordinación de la acción voluntaria. Aunque inicialmente cada organización trabajaba de manera independiente, la
persona voluntaria se convirtió en el
nexo común que las integraba. Con el paso de los años, el proyecto ha crecido notablemente, alcanzando la colaboración de
107 organizaciones que hoy trabajan juntas para ofrecer una
respuesta solidaria a las necesidades de la sociedad sevillana.
La Plataforma se centra en
tres líneas principales:
organizar el voluntariado ofreciendo
formación y orientación personalizada para conectar a los interesados con tareas adecuadas a sus perfiles;
sensibilizar a la ciudadanía, a través de acciones dirigidas a instituciones y actores sociales, sobre la importancia y el impacto del voluntariado en la comunidad; y
apoyar a las entidades miembros, facilitando
recursos como la elaboración de
planes y asesoramiento en temas legales, para mejorar la calidad y cohesión de la acción voluntaria.
Para mantener su actividad, la Plataforma cuenta con el
apoyo de varias instituciones, como la Fundación Cajasol, el Ayuntamiento de Sevilla y la Junta de Andalucía.
Además, ha firmado
acuerdos con empresas para ofrecer formación en voluntariado a sus empleados, promoviendo la colaboración entre el sector privado y las entidades sociales.
Proyectos destacados
La Plataforma del Voluntariado Social de Sevilla ha desarrollado
diversos proyectos para promover la acción voluntaria. Uno de los más destacados es
Tú sí que faltas, dirigido a jóvenes de 15 a 20 años, quienes, tras recibir charlas en colegios e institutos, participan en actividades voluntarias en distintas entidades. Este programa ha conseguido que muchos de ellos continúen colaborando
a largo plazo.
Otro proyecto clave es la
Escuela de Responsables de Voluntariado, que forma a coordinadores de voluntariado en áreas como acogida de voluntarios, legislación, emergencias y el impacto de la inteligencia artificial en la gestión social.
Desafíos y gestión
La Plataforma ha enfrentado importantes
desafíos a lo largo de los años, desde organizar el trabajo de las 107 entidades que la componen hasta fomentar una mayor
participación juvenil en el voluntariado, cuya edad media se sitúa en torno a los 55 años.
Además, la
pandemia supuso un
reto adicional, impulsando la digitalización y nuevas formas de intervención. Ahora, la integración de la
inteligencia artificial se plantea como una herramienta clave para mejorar la gestión y eficiencia del voluntariado.
Para poder
coordinar y gestionar la labor de las 107 organizaciones, la Plataforma cuenta con una
junta rectora formada por siete representantes de distintas entidades, encabezada por José Pedraza Pérez. Además, la Plataforma de Sevilla ostenta la
presidencia de la Plataforma Andaluza de Voluntariado a través de Armando Rotea Molero.
Impacto en la comunidad
El
impacto del voluntariado en Sevilla es incalculable. En 2025, la Plataforma está llevando a cabo un
estudio sobre el impacto social de las personas voluntarias, que se publicará a finales de año.
Sin embargo, estudios anteriores estiman que, sólo en Andalucía,
los voluntarios aportan medio millón de horas al mes.
Esta cifra subraya la
relevancia del voluntariado en la vida cotidiana y en el desarrollo de la ciudad, ya que, sin este
esfuerzo desinteresado, los recursos económicos necesarios para cubrir las mismas necesidades serían insostenibles.
Planes de futuro
El
futuro de la Plataforma del Voluntariado de Sevilla pasa por continuar su expansión en la provincia, acercando sus servicios y programas a los
barrios y municipios más alejados de la capital. También se trabaja en
mejorar la utilización de los recursos disponibles entre las entidades, promoviendo el intercambio de servicios y necesidades entre ellas.
La invitación está abierta: si sientes el impulso de ayudar, la Plataforma es el lugar perfecto para
canalizar tu compromiso con los demás.