El lince ibérico que fue encontrado muerto en la noche del pasado martes en una finca cinegética de la provincia de Ciudad Real procedía de la primera suelta en libertad realizada en la zona de Guarrizas, en la provincia de Jaén.

Este lince ibérico ('Linx pardinus'), de nombre 'Grazalema', fue liberado por la Junta de Andalucía dentro del Parque Natural de Despeñaperros el pasado mes de diciembre y era uno de los primeros linces de reintroducción en la naturaleza que habían nacido de ejemplares en cautividad.

La hembra de lince, cuyos padres eran Córdoba y Candiles, nació el 31 de marzo de 2010 en el centro de cría en cautividad de 'La Olivilla' y junto a 'Granadilla' -también nacida en cautividad- formaban parte del grupo de cinco ejemplares liberados en el área de Guarrizas.

Además de 'Grazalema' y 'Granadilla', también fue reintroducido en libertad 'Granizo', un joven macho silvestre capturado en la zona de Cardeña (Córdoba) y nacido en 2010, a los que se unieron Íbero y Eva, dos ejemplares adultos capturados en la sierra de Andújar.

Los ejemplares nacidos en cautividad, uno de los cuales ha sido encontrado ahora muerto, fueron sometidas a un proceso de entrenamiento específico para evitar problemas de supervivencia en el medio natural.

En el caso del resto del grupo de cinco linces liberados, todos ellos habían seguido un proceso previo de estudio y adaptación en cercados preparados, en lo que técnicamente se denomina suelta blanda, desde donde posteriormente fueron liberados al medio natural.

Los ejemplares soltados en ésta área de la provincia de Jaén, próxima a la provincia de Ciudad Real, estaban siendo seguidos por GPS y llevaban colocados collares de localización que controlaban todos sus movimientos.

El éxito de la reintroducción en la zona de Guarrizas se considera fundamental para la conservación del felino en mayor peligro de extinción del planeta, puesto que se trata de un territorio que reúne las características adecuadas para volver a fijar nuevas poblaciones en el medio natural.

De esta manera, las instituciones y organismos implicados en la conservación del lince ibérico quieren ampliar y expandir las poblaciones donde pueda criar en libertad este felino.

Otro de los objetivos en el futuro es lograr la presencia de lince en zonas de distribución histórica donde esta especie estuvo presente, como es el caso de Castilla-La Mancha, Extremadura o Portugal.

El Ministerio de Medio Ambiente y la Junta de Andalucía trabajan en los últimos años en la cría en cautividad del lince ibérico, un programa que busca proporcionar animales adecuados para llevar a cabo el refuerzo de las poblaciones actuales y su reintroducción en el medio natural.