Acuden a diario a la nave de la Ciudad del Transporte para que la multinacional les pague sus deudas, que van desde los 5.000 euros en adelante
Tras más de un año acudiendo a diario a los terrenos de la Ciudad del Transporte donde Zahav Motor aspira a tener listo para este verano su fábrica de camionetas y todoterrenos de bajo coste, ya hay empresas locales como Xedisur (Xerezana Distribuidora del Suroeste S.L.), que le ha suministrado tuberías y ferretería, que se ha plantado tras cansarse de dar votos de confianza en balde. El último compromiso del director de expansión de Zahav, José Luis Mesía, tras muchas llamadas y encuentros era saldar los 4.950 euros pendientes “entre el lunes y el martes” y de nuevo ayer los emplazaron para finales de semana. “Nos ha vuelto a dar largas y así llevamos desde hace más de un año y ya no se lo vamos a permitir”, critica Ismael González, gerente de Xedisur.
Como relata, su trabajo para Zahav comenzó a través de la relación comercial que su empresa mantiene con Masol, la constructora, a la que la multinacional de capital chino-iraní debe dos millones de euros-. Cuando aceptaron suministrar material para Masol nunca pensaron que iban a llegar hasta este extremo. “Esto es la pescadilla que se muerde la cola porque tanto a nosotros como al resto quien nos tiene que pagar es Masol, pero no están cobrando nada de Zahav y no tienen dinero para pagarnos”. Viendo que la cosa se complicaba y tras la protesta que protagonizaron el pasado verano varios proveedores, esta empresa cobró 5.950 euros de los 11.000 que les debían.
A partir de ahí y viendo que el problema tenía pocos visos de arreglarse, Masol redactó un documento con firma tanto de Zahav y de Xedisur por la que la constructora se eximía de cualquier responsabilidad de la cantidad pendiente y se endosaba un pagarés para el pago de la deuda que quedaba por parte de Zahav.
Tras varias reuniones que no han terminado de fructificar, el último compromiso de Mesía señalaba un pagarés de 60.000 euros firmado por su socio, del que sigue sin dar datos, y que está en poder de Masol para descontar la deuda de casi 5.000 euros de la empresa. Tampoco esto ha funcionado.
Lo peor, como lamenta González, es que Zahav “está jugando con las ilusiones de la gente que acude a diario a llevar currículums”, dado que tiene claro que a día de hoy es “imposible” que el proyecto eche a andar en verano, con todo el trabajo que tienen por delante y más teniendo en cuenta que apenas son tres los operarios que trabajan en la urbanización en estos momentos “y sin cobrar”, añade.
Según ha podido saber este medio, en el mismo caso que Xedisur, hay otros empresarios de la provincia, uno de ellos de 82 años, que cada día van a las instalaciones con la esperanza de poder cobrar y con deudas que superan los 80.000 euros.
Respecto a este asunto, Mesía admite tener una deuda pendiente, pero asegura que “vamos pagando poco a poco”, versión que desmiente tajantemente este proveedor.
Ya hay una empresa que ha ido al juzgado Una de las empresas a las que Zahav Motor debe dinero ha decidido poner su caso en manos de los juzgados. Una opción que no descartan otros afectados si siguen sin ver solución.
Está previsto que los ingenieros lleguen hoy Está previsto que tanto el nuevo socio inversor que tiene Zahav, del que no ha desvelado su identidad, comolos ingenieros lleguen hoy a la fábrica para replantear la cadena de montaje.