Un estudio de la Universidad de Granada ha demostrado que el ibuprofeno, un antiinflamatorio no esteroideo, tiene propiedades beneficiosas en relación a otros de este tipo en el tratamiento del hueso en reparación, es decir, tras una fractura o una cirugía ósea.
Los científicos han comprobado en ensayos in vitro que, a diferencia de otros, este fármaco, administrado a dosis terapéuticas, no muestra un efecto adverso sobre la capacidad proliferativa ni sobre la síntesis de osteocalcina del osteoblasto, célula directamente implicada en el proceso de formación y regeneración del tejido óseo, ha informado hoy la Universidad de Granada.
Los osteoblastos son las células del hueso, sintetizadoras de la matriz ósea, por lo que desempeñan un papel fundamental tanto en el desarrollo como en el crecimiento del hueso, encargándose de su mantenimiento, crecimiento y reparación.
En el estudio, publicado recientemente en la prestigiosa revista "Journal of bone and mineral metabolism", los científicos valoran los efectos del ibuprofeno en las terapias relacionadas con el tejido óseo.
Según la profesora del departamento de Enfermería de la Universidad de Granada Concepción Ruiz, autora principal del estudio, hasta la fecha apenas se disponía de información sobre el efecto del ibuprofeno sobre los osteoblastos.
El trabajo ha demostrado que las dosis terapéuticas de ibuprofeno no inhiben la proliferación celular y la síntesis de la osteocalcina en la línea celular MG-63, mientras que, si se administra a una dosis más alta puede producir alguna activación de las células, lo que podría explicar el aumento en la expresión de marcadores de membrana y la disminución de la capacidad fagocítica.