Una semana después de convertirse en campeón de la Eurocopa, el jugador culé llegó a un paraje de ensueño para convertirse en el marido de su novia y madre de su pequeña Valeria. Tras la llegada del futbolista del brazo de la madrina, llegó la novia de blanco y radiante... ¿Quieres saber más acerca de este romántico enlace?
Para su gran día, Andrés Iniesta se vistió con un elegante chaqué y, mientras esperaba la llegada de la novia, se escuchaba de fondo la banda sonora de la película Gladiator y los vítores de los curiosos que se acercaron hasta allí.
Como marco incomparable, el castillo de Tamarit, un paraje de ensueño con mar de fondo, en el que el jugador del F.C. Barcelona y Anna Ortiz se dieron el sí, quiero. La novia no podía desdibujar la sonrisa bajo el velo blanco que le cubría el rostro, enfundada en un maravilloso vestido de la diseñadora Teresa Helbig que acompañó con un ramo de flores rosas.
Antes de comenzar la ceremonia, los novios se fundieron en un romántico y tierno abrazo y, para dar comienzo, la pequeña Valeria, de un año, precedió la entrada de su madre en brazos de su tía. La hija de Iniesta y Anna iba con un precioso vestidito blanco y una pequeña corona de flores adornando su cabello.
En primer lugar, había unas 300 personas invitadas a la ceremonia civil, que ofició el alcalde de Tarragaona, José Félix Ballesteros. Posteriormente, unos 700 invitados asistieron al banquete que tuvo lugar en Mas d'en Ros, un popular restaurante cercano al castillo, donde se celebró la cena, en la que no faltaron los vinos que se elaboran en las bodegas que el novio tiene en su localidad natal, Fuetealbilla (Albacete).
Entre los invitados destacaron Xavi Hernández, elegante con un traje negro y sin compañía femenina; Antonella Rocuzzo presumiendo de embarazo con un vestido largo en tonos muy vivos y de la mano de Leo Messi; Sergio Busquets quien llegó solo; Pedrito y su novia Carol; Sandro Rosell y su mujer; Samuel Eto'O y Andoni Zubizarreta acompañados de sus respectivas parejas...
Mientras Shakira se encuentra cumpliendo con sus obligaciones por todo el mundo, Gerard Piqué y Carles Puyol, quien está soltero y sin compromiso tras una relación fallida con Giselle, formaron una divertida e improvisada paraje en la boda de su compañero de equipo.
Andrés Iniesta y Anna Ruiz llegaron al banquete montados en un clásico Bentley y allí posaron para los medios de comunicación ya convertidos en marido y mujer. Los recién casados salieron de la mano para compartir el feliz momento durante algunos minutos con la prensa y los curiosos que se acercaron.
El matrimonio selló su gran amor con un romántico beso ante las cámaras, mientras el manchego agradecía a los periodistas su presencia: "Gracias a todos por haber venido aquí a cubrir este momento tan bonito, tan especial y tan inolvidable. A toda la gente también que ha salido, que nos ha demostrado su cariño, su respeto hacia nosotros. Es un día muy feliz, el más feliz y vamos a brindar por la felicidad y porque todo vaya muy bien".