El jurado el Premio Iberoamericano de Diseño Cortes de Cádiz 2015 que concede el Ayuntamiento de Cádiz ha resuelto otorgar el premio al trabajo titulado 'Piriñaca, rebujina de salitre y papelillo', obra del diseñador gaditano Pablo Santos y de la diseñadora chilena Christine Schlack. La obra ha sido seleccionada de entre las 24 aspirantes al galardón.
En una nota de prensa, el Ayuntamiento de Cádiz indica que, según la aportación del trabajo presentado, 'Piriñaca' es "un compendio de historias y leyendas populares que ponen de manifiesto la cara muchas veces oculta del pueblo gaditano".
Con el nombre de la famosa guarnición, la idea es "destacar la voz del pueblo a partir de su esencia, un picadillo de las historias que sus calles cuentan y que pasan de generación en generación".
La obra busca "sacar a relucir el hecho de que Cádiz es una ciudad alimentada por su propia gente, reflejo de la historia, la cual ha demostrado que no hay bomba o fanfarrón que se suba a las faltas de su libertad".
Este proyecto "trata de plasmar la identidad inmaterial de la ciudad y hacerla accesible tanto al visitante como al autóctono" y, además, es "un ejercicio abierto a muchas posibilidades, con la oportunidad de seguir siendo completado en contenido y expandido en aplicaciones".
MENCIÓN ESPECIAL A 'GREW'
Por otra parte, el jurado ha otorgado una mención especial para el trabajo titulado 'Grew', de la diseñadora también chilena María Paz Collao. Según su autora, 'Grew' nace de "la idea de querer dar otras alternativas, huir de lo habitual y lo corriente y de poder dar a las personas la oportunidad y libertad de elegir entre distintas opciones, incentivándolas a buscar, elegir y cambiar".
El proyecto consiste en un pupitre modular con macetero basado en la idea de vincular a los niños con la naturaleza, interviniendo desde el método de enseñanza tradicional y sistemático a uno más significativo, donde el pequeño tenga libertad para expresarse.
También sirve de apoyo "para generar en los niños actitudes de colaboración, ya que cada pupitre es compartido por dos alumnos y, gracias a su forma, permite juntar varios pupitres en distintos módulos que crean dinámicas de actividad grupal para toda la clase".
Además mediante la interacción con el pupitre "se crean nuevos nexos de unión entre los niños y el medio natural". "La sencillez de añadir un macetero al pupitre de cada niño permite empezar a entender la importancia que el medio natural tiene en nuestras vidas", explica el Ayuntamiento de Cádiz.
Igualmente, "sirve como una primera toma de responsabilidad: el niño, al interactuar a diario con la planta de su maceta, ve que sus acciones son decisivas para el desarrollo de dicho ser vivo", según la documentación del trabajo.
EL JURADO Y LA ENTREGA
El jurado del IX Premio Iberoamericano Cortes de Cádiz de Diseño ha estado presidido por la concejal de Juventud y Artesanía, Carmen Sánchez, y compuesto por el vicedirector de la Escuela de Artes de Cádiz, Juan Candón; la redactora jefe de la revista Yorokobu, Mar Abad; el vicepresidente de la Asociación Andaluza de Diseñadores, Eugenio Jiménez; y el profesor del departamento de moda de la Escuela de Artes Francisco Javier Cortés.
El premio de Diseño, al igual que el resto de categorías de los Premios Cortes, se entregará en el mes de marzo durante los actos constitucionales por el aniversario de la Constitución de 1812. Los premios iberoamericanos Cortes de Cádiz, puestos en marcha por el Ayuntamiento de Cádiz, constan de doce modalidades y tienen un "marcado carácter iberoamericano".
El objetivo es difundir los trabajos de investigadores, creadores y personas que destaquen en diversos campos, entre otros, la ciencia, arte, diseño, política y empresa. Estos galardones pretenden destacar la importancia que tuvo Cádiz en los años de las Cortes, cuando era un punto de encuentro de la vanguardia española, europea y americana.
