El presidente y portavoz del grupo parlamentario de Ciudadanos (C's) en la Cámara andaluza, Juan Marín, ha animado este jueves a la presidenta de la Junta, Susana Díaz, a ser "pioneros" y eliminar el aforamiento de los parlamentarios andaluces.
Así se lo ha trasladado en el transcurso de una pregunta que le ha formulado a la presidenta en el Pleno de este jueves, donde Marín también ha defendido la necesidad, a su juicio, de reformar la Ley Electoral de Andalucía y promover otras medidas que repercutan en "más democracia", como la limitación de mandatos de los presidentes o la configuración de un sistema de "listas abiertas".
En su respuesta, Susana Díaz no se ha pronunciado de forma explícita sobre la referida propuesta de eliminar los aforamientos, si bien se ha mostrado partidaria de impulsar desde el "acuerdo" entre los grupos parlamentarios medidas para "recuperar la confianza de los ciudadanos en las instituciones", y en relación a una reforma de la Ley Electoral ha animado a los partidos a "llegar a un acuerdo" para alcanzarla y que "en las próximas elecciones autonómicas" ya forme parte del sistema legislativo de la comunidad.
Al respecto, la presidenta de la Junta ha emplazado a abordar esa reforma en un grupo de trabajo en el seno de la Cámara, e introducir en ella elementos que "permitan una mayor proporcionalidad", y ello desde la premisa de que actualmente en la sociedad española se vive una "crisis de confianza" respecto a las instituciones, y "es el momento de que en todas las instituciones, también en el Parlamento andaluz, hablemos de democracia con mayúsculas", que favorezca "diálogo, consenso e igualdad por encima de cualquier interés partidista".
En esa línea, la presidenta ha abogado por que "se aborde el debate sobre la doble vuelta" en las elecciones, o las "listas desbloqueadas", entre otras medidas de un "catálogo" de propuestas que "acerquen la credibilidad de los ciudadanos hacia los políticos", y se ha mostrado convencida de que "si hay voluntad" de acuerdo entre los grupos, la Ley Electoral andaluza "seguirá siendo una de las leyes más avanzadas" de esa naturaleza en España, por lo que ha animado a la consecución de ese acuerdo y a que la reforma "ya forme parte de nuestro sistema en las próximas elecciones autonómicas", que son los comicios que se rigen por la misma.
En su primer turno de palabra, el portavoz de Ciudadanos, Juan Marín, ha recordado que la Ley Electoral andaluza lleva "casi 30 años en vigor", desde enero de 1986, y aunque en ese transcurso de tiempo ya "ha sufrido modificaciones para adaptarse a las exigencias" de otras normativas como la Ley Orgánica de Régimen Electoral General (Loreg), C's es partidario de su reforma y de plantear ese "debate" en la Cámara, como, según ha avanzado, va a hacer su grupo parlamentario, y se ha mostrado esperanzado en que "cuando se convoquen unas nuevas elecciones autonómicas" en Andalucía se lleve a cabo "un proceso más participativo" y se traslade al Parlamento la "voluntad real" de los electores.
MEDIDAS PARA LOGRAR "MÁS DEMOCRACIA"
En esa línea, Marín ha subrayado que C's plantea "medidas para afrontar el nuevo tiempo en el que nos encontramos, cambios profundos" en el sistema político, y tras preguntarle a la presidenta si ella y su gobierno tienen intención de reformar la Ley Electoral "a lo largo de la legislatura", ha afirmado que en la actualidad la máxima de que "todos los votos tienen el mismo valor solo es verdad a la hora de que los ciudadanos lo emitan en las urnas", porque el reparto de representantes que posteriormente se lleva a cabo "no es justo", por lo que hay que abordar en la misma la cuestión de la "proporcionalidad".
Además de esa reforma, Ciudadanos plantea otras medidas para posibilitar "más democracia", como "la limitación de mandatos de los presidentes" a un máximo de dos legislaturas, ocho años --tiempo "suficiente para ejecutar un proyecto"--, así como "un sistema de listas abiertas", porque "ya está bien de que los ciudadanos no puedan elegir libremente a quienes les representen" y para que se evite así "el clientelismo político dentro de los partidos".
En relación a los aforamientos, Marín ha aseverado que con ellos "no todos los andaluces ni los españoles somos iguales ante la justicia", y ha subrayado que actualmente hay "10.000 aforados en España", de los que "2.300 son cargos públicos, políticos", y "muchos" de ellos se valen de esa condición para "eludir a la justicia", algo que ha criticado.
Por ello, ha defendido la eliminación de los aforamientos como "una buena medida para luchar contra la corrupción política", y ha puesto como ejemplo que "Alemania y Reino Unido tienen cero aforados, y no les va tan mal" a ambos Estados.
Marín ha concluido trasladando el deseo de los parlamentarios de su grupo de "ser iguales al resto de los andaluces ante la justicia", y propiciar mediante las reformas pertinentes la eliminación de "privilegios" como el de los aforamientos que conformen "ciudadanos de primera y de segunda en Andalucía".
SUSANA DÍAZ DEFIENDE "REGLAS DE JUEGO IGUALES PARA TODOS"
En su intervención, la presidenta de la Junta ha compartido ese deseo de que no haya "ciudadanos de primera y de segunda", pero no sólo en Andalucía, sino en el conjunto de España, según ha enfatizado, por lo que ha defendido que haya "reglas de juego iguales para todos".
Susana Díaz también ha proclamado que "hay muchos elementos desde los que Andalucía puede dar ejemplo", y que con el trabajo a desarrollar en el Parlamento para abordar una reforma electoral se puede lograr que la comunidad "vuelva a ser vanguardia", y se logre un acuerdo que "se impulse al resto de España".
Así, ha destacado que en Andalucía ya se han dado pasos, de modo que "el porcentaje con el que los diputados autonómicos se sientan en la Cámara andaluza es inferior" al de otras comunidades, y se han adoptado medidas para "reforzar las incompatibilidades, la participación de los ciudadanos y aumentar los controles para que nadie cobre dentro y fuera de la Cámara".
"Hoy los partidos tienen que renovarse" y "hay que empoderar a los ciudadanos", ha sentenciado Díaz, que ha concluido mostrando su convencimiento de que "son más cosas las que se pueden hacer para recuperar la confianza ciudadana en las instituciones".
