Simón Astorga, la gran promesa mágica

Desde tiempos remotos hombres y mujeres han sentido una enorme atracción hacia lo sobrenatural, lo desconocido, lo mágico. Hacia un mundo desconocido que hace que lo imposible se convierte en real. Un mundo en el que las ilusiones adquieren forma y sentido. En definitiva un mundo especial y mágico.

     La magia aunque no la ves, está en todas partes: en tus sueños, en las sonrisas de quienes te rodean, en las ilusiones por vivir y compartir. La magia no son poderes ocultos o sobrenaturales que podemos mostrar al mundo; la magia es el asombro que cada uno tiene en sus corazones al ver lo que nosotros realizamos.

     La magia es el efecto que se puede crear, en un niño al sacarle una sonrisa o en un adulto al hacerlo enmudecer. Es un modo de alejar sus problemas rutinarios y crearles una distracción y por lo menos robarle una sonrisa a alguien que lo necesita, esa es la función del mago. 

    Donde terminan los hilos de lo imposible, ahí vive la magia. Donde no hay excusas para que las ilusiones desaparezcan, ahí viven los magos. Magos niños, jóvenes y adultos saben que su arte sirve para darle la certeza a la gente, de que sus deseos pueden hacerse realidad…como por arte de magia.

Gran Promesa Mágica

Simón Astorga Sánchez es un joven asidonense que a sus 27 años de edad se ha convertido en una “Gran Promesa Mágica”. Su afán por el misterioso mundo de las artes ocultas empieza desde muy pequeño, siendo Juan Tamarit, Pepe Carol y Magic Andreu sus principales referentes.

     Sin embargo no es hasta el año 2005 cuando se interesa completamente y se introduce de pleno en la magia. En ese mismo año empieza a trabajar de animador en fiestas infantiles y se da cuenta de que la magia puede ser un complemento básico en sus espectáculos.

     A partir de ahí, Simón Astorga, nombre artístico que él mismo elige, empieza a investigar sobre el increíble y fabulosos mundo de la magia, primero a través de Internet y posteriormente con libros y videos. Sin profesores. Siendo este uno de los rasgos que caracterizan a este mago. “Todo lo que sé lo he aprendido investigando, nunca he tenido profesores de magia que me enseñen a hacer mis trucos” afirma Simón. Asimismo, señala que el programa emitido en Canal Sur, “Shalakabula” se convierte en su escuela Mayor y donde posteriormente participaría. “Los magos que aparecían en Shalakabula hacían sus trucos de magia y como yo tenía ciertas bases, investigaba y lo hacía”

Espectáculos de magia

Dada la complejidad que rodea el inexplicable mundo de lo imposible, podemos distinguir muchos tipos de magia, aunque generalmente se suele dividir en dos grupos: la magia de close up y la magia de salón o escenario. El primer grupo es el tipo de magia que “te hacen en tus narices por ejemplo con una baraja de cartas” señala Simón. Además afirma que “es la que está más acostumbrado a realizar y la que más variedad permite, ya que con una sola baraja de cartas puedes tener un espectáculo de magia”

     Sin embargo donde Simón Astorga se siente más satisfecho y más realizado es cuando realiza magia de salón ya que “es donde más se divierte y donde tiene sus juegos más impresionantes”

     Simón Astorga divide sus espectáculos de magia en tres partes. En la primera parte lo que pretende este divertido mago es que “el público entre en calor, los vuelve locos”. Hace que el público pierda la vergüenza y los hace participar de diferentes formas, ya sea o bien gritando, tocando las palmas etc. Realiza juegos interactivos en los que el humor juega un papel fundamental.

     En la segunda parte, el ritmo de sus espectáculos da un giro radical y se convierte en algo más serio, realizando juegos de mentalismos que hace que el público se quede con la boca abierta.

     Y para finalizar acaba su gran actuación con una gran ilusión, con algo sorprendente que hace que la gente enmudezca de asombro. Momento en el que Simón Astorga pronuncia su frase clave: “los magos no somos ni tramposos ni truquistas, simplemente somos ilusionistas”. La gente recupera la sonrisa y los aplausos pasan a ser los protagonistas de la sesión.


El humor y la música

Todos sabemos que son los trucos de magia los que distinguen a un mago de otro. Por ejemplo las cartas de Juan Tamarit o los increíbles trucos de David Copperfield. Sin embargo Simón Astorga no quiere que se le comparen con otros magos ni que se le asocien con un truco de magia en concreto. Como él mismo señala, quiere que se le conozca como Simón Astorga, “el ilusionista”. “Yo hago magia, ¿con qué?, pues con lo que pille” señala. Normalmente suele utilizar las cartas, ya que es lo más práctico y lo más barato, aunque son muchos los recursos que utiliza en sus espectáculos, sobre todo el humor y la música.

     Como vemos, desde muy pequeño Simón tuvo como referentes, diferentes personalidades del mundo de la magia en los que el humor jugaba un papel importantísimo. Tal era el caso de Juan Tamarit y Pepe Carol. “El humor es la base de mi magia, porque me gusta que la gente lo pase bien y se diviertan” afirma el mago. Sin embargo, también destaca un elemento muy importante en sus espectáculos: la música. “La música además de ayudarte a la hora de hacer el juego, hace que la gente pase del miedo a la risa y viceversa”

Escuela de Magia

Sin embargo, aunque la formación de un mago es difícil y compleja, el trabajo que desempeñan a lo largo del año no es lineal, es decir, hay que diferenciar diferentes temporadas. Por un lado tenemos la Temporada Alta, que se corresponde con los meses de mayo y junio, en los cuales tienen lugar numerosos eventos como comuniones, ferias, etc y en los que el ritmo de trabajo es abundante. La Temporada Media que sería el resto del verano, donde se incluirían bolos, despedidas de soltero, cumpleaños, etc. Y la Temporada Baja que coincide fundamentalmente con el invierno y donde se lleva a cabo la magia en teatros, pubs, etc, pero en menor medida.

     Por ello y como medio para evitar en cierta medida las consecuencias de la temporada en el que el ritmo de trabajo es menor, Simón Astorga le propone un proyecto al Área de Cultura del Ayuntamiento de Medina Sidonia basado en la creación de una Escuela de Magia.

     De esta forma, el ente municipal de la localidad estudia la propuesta, siendo aceptada poco tiempo después. Así nace la Escuela de Magia Simón Astorga, una de las pocas escuelas de magia que existen en Andalucía.

     “Curso de iniciación en el arte del ilusionismo”. Este es el nombre del curso que imparte Simón Astorga a 19 alumnos de todas las edades. Alumnos de los cuales se siente orgulloso y que el mismo señala que “aprende doblemente, por un lado aprende lo que ya sabe y por otro lado aprende de todos ellos”

Trayectoria Televisiva

Nos encontramos frente a un extraordinario mago con una carrera sorprendentemente ascendente. En menos de un año como profesional logró convertirse en una de las grandes promesas mágicas de Andalucía.

     Transcurridos solo ocho meses desde su debut mágico en una actuación en su pueblo natal, Medina Sidonia a principios de 2005 nuestro amigo ya salía en prestigiosos programas de televisión como “Shalakabula” , Presentado por Paz Padilla o “Mira la vida” de Rafael Cremades.

     Un año más tarde, Simón Astorga, hizo una aportación mágica, en la televisión local de Jerez de la Frontera (Onda Jerez TV). Donde intervino en numerosos capítulos del programa televisivo “Kilómetro Cero”.

     A finales de 2007, Simón intervino en la primera edición del programa televisivo “Tu si que vales” emitido a través de la prestigiosa cadena de televisión Telecinco y convirtiéndose en uno de los semifinalistas de aquella edición. Mientras participaba en este programa, estuvo haciendo los casting de “Tienes Talento”, donde logró superar la fase de casting e intervino en el programa.

     Aunque en un primer momento no obtuvo ningún apoyo y solo escuchaba frases como “estas desaprovechando tu vida o estas perdiendo el tiempo”, después de unos primeros años mágicos repletos de actuaciones en todo tipo de fiestas, celebraciones y galas, sus más allegados se sienten orgullosos de él y le muestran una gran admiración.

     Estamos frente a un claro ejemplo en el que el tiempo, la dedicación y el esfuerzo han dado resultado. Simón Astorga ha demostrado ser un gran mago capaz de hacer real lo imposible, un gran artista capaz de hacer de una baraja de cartas todo un espectáculo y un gran polifacético capaz de combinar la magia con el humor, pasando radicalmente de producir en el espectador una carcajada a enmudecerlo de asombro.

     En definitiva nos encontramos con una gran persona y mejor ilusionista al que le esperan innumerables proyectos que no harán más que reafirmar su condición de “Gran Promesa Mágica”.

     Pero recuerda que solo pueden creer en la magia y disfrutarla los que todavía se permiten soñar.