El comisario europeo de Acción por el Clima y Energía, Miguel Arias Cañete, ha opinado hoy que en España no se es consciente "del impacto" que van a tener las nuevas políticas energéticas comprometidas en la Cumbre de París sobre el cambio climático (COP21) que, ha advertido, son "irreversibles".
"La Cumbre de París no ha tenido un debate en España como en otros países europeos, pero los cambios en favor de una economía descarbonizada van a ser irreversibles", ha advertido el comisario.
Arias Cañete, quien ha impartido una conferencia sobre innovación energética en un foro empresarial de Sevilla, ha confesado que "siempre" tiene "espinas clavadas en el corazón" respecto a la implementación en España de las políticas comunitarias y ha lamentado que las administraciones españolas no estén aprovechando sus oportunidades en el caso de las nuevas directrices energéticas.
Ha avisado de que el gobierno central y los ejecutivos autonómicos y locales "no están utilizando" adecuadamente las inversiones energéticas de la UE, en especial las del Plan Juncker, dotado con unos 300.000 millones de euros, y les ha recomendado que agrupen sus proyectos, pues el Banco Europeo de Inversiones (BEI) prefiere financiar iniciativas de mayor presupuesto, y la reforma de la legislación sobre propiedad horizontal pues un objetivo estratégico es la eficiencia energética de los inmuebles.
Arias Cañete ha añadido que la UE y las potencias mundiales se han comprometido en la COP 21 de París a implementar "un cambio radical" en sus actuales sistemas energéticos y ha enfatizado que "la sustitución de combustibles fósiles por energías renovables no se va a producir de un día para otro, pero es un proceso irreversible".
"Estamos en un proceso imparable de descarbonización de nuestras economías; la eliminación del gas y del carbón va a ser una revolución radical y el proceso de sustitución de las energías fósiles por las renovables es un imparable", ha apostillado.
El comisario ha recordado que Europa fue pionera en fijar objetivos de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero y de fomento de las energía renovables, pero ha advertido de que el 20 por ciento fijado para 2020 se deberá incrementar en 2030.
En su opinión, Europa carece de un mercado eléctrico interior y mantiene 28 sistemas nacionales diferentes y mal conectados, y deberá afrontar las dificultades de transformar el actual sistema energético "centralizado" y en manos de pocos operadores a otro, más diversificado por el crecimiento de las energías renovables.
Con todo, ha recordado que las inversiones previstas en la COP 21 para la descarbonización de la economía mundial ascenderán a unos 13.500 billones de dólares, un presupuesto en el que la UE debe de ser protagonista con una apuesta por la innovación.
