Políticos desaprensivos

Cada vez que alguien menciona la crisis, se alza una voz que reclama si no un Gobierno de concentración, al menos, un acuerdo entre los partidos con mayor representación parlamentaria: PSOE y PP. Es difícil encontrar una palabra capaz de justificar por qué ni Zapatero ni Rajoy son capaces de renunciar a sus intereses políticos de partido en aras del interés general. Un acuerdo político de esta naturaleza permitiría poner en común las mejores recetas económicas para crear empleo, generar confianza en el mundo empresarial y rebajar la angustia de los ciudadanos que están en el paro o necesitan desesperadamente un crédito bancario.

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Si socialistas y populares se entendieron en el País Vasco y gracias a ese acuerdo Patxi López es lehendakari y --lo que es más revelador--, sí también se han puesto de acuerdo para respaldar a las Cajas de Ahorro mediante el multimillonario FROB, ¿qué explicación pueden dar los mencionados señores Zapatero y Rajoy para no acordar un plan para encarar la crisis? La verdad es que --más allá del interés partidista-- no se me ocurre ninguna.
Todavía están a tiempo. Si no lo hacen, en las próximas elecciones, habría que empezar a considerar la posibilidad de votar en blanco. Votar en blanco para manifestar nuestro rechazo a unos políticos incapaces, como digo, de distanciarse de sus intereses de partido para pensar en el bien común. Hartos están ya muchos ciudadanos de tanto político desaprensivo.