Un Atletico de más a menos tropieza ante un Arsenal combativo
Un Atlético de Madrid que fue de más a menos tropezó ayer en Londres ante un Arsenal combativo que, pese a los problemas que tuvo para rentabilizar sus ocasiones
At. de Madrid 1
—Arsenal—
Vito Mannone; Sagna, Gallas, Djourou, Eboue (Mérida, m.45); Denilson, Traore (Wilshere, m.45), Ramsey (Cesc, m.66), Rosicky (Clichy, m.45); Van Persie (Eduardo, m.66); Bendter (Arshavin, m.66).
—Atlético de Madrid—
Sergio Asenjo; Heitinga, Ujfalusi, Juanito, Álvaro Domínguez (Leandro Cabrera, m.55); Reyes (Jurado, m.68), Raúl García (Santana, m.69), Paulo Assuncao, Sinama-Pongolle (Maxi Rodríguez, m. 41); Forlán (Bastón, m.73); Agüero (Pacheco, m.53).
Árbitro:
Mark Clattengburg (Inglaterra).
Goles:
1-0 Arshavin (m.86)
1-1 Germán Pacheco (m.88)
2-1 Arshavin (m.90)
Incidencias:
Partido de la primera jornada de la Copa Emiratos disputado en el estadio Emirates, en Londres, ante 54.224 aficionados.
Un Atlético de Madrid que fue de más a menos tropezó ayer en Londres ante un Arsenal combativo que, pese a los problemas que tuvo para rentabilizar sus ocasiones, se apuntó este primer pulso amistoso frente a los rojiblancos con dos goles del ruso Andrey Arshavin (2-1).
Se trató de un calentamiento con el que el club madrileño evaluó el estado de la plantilla de cara a la fase previa de la Champions. Y le dio, sin duda, motivos para hacerse preguntas.
Su primer duelo en el Emirates ante los gunners dentro de este torneo amistoso ha servido a los discípulos de Abel Resino para medir su forma física y analizar las estrategias de su adversario londinense, un once que podría potencialmente ser también su rival en la competición europea.
Por su parte, los ingleses, ya sin dos de sus bazas más sólidas, Emmanuel Adebayor y Kolo Touré –vendidos al Manchester City en el mercado estival– no parecieron acusar dichas ausencias y sometieron al Atlético a un test más que decente de pretemporada.
Abel busca el equilibrio en esta formación y estudia la maquinaria actual de la que dispone.
Apenas unos minutos después del pitido inicial, llegó un primer aviso del conjunto madrileño, que incluyó al sevillano José Antonio Reyes en la titularidad. El Kun Agüero mandó un remate de cabeza al poste tras un lanzamiento de esquina que le envió Reyes –un ex gunner al que ayer le cayó más de un abucheo–, y que tocó por el camino Raúl García. Se quedó en susto pero levantó la alarma roja del once anfitrión.
Sin Manuel Almunia en la convocatoria, la formación de Arsene Wenger, quien dejó también al internacional español Cesc Fábregas en el banquillo junto a su compatriota Fran Mérida, dando al holandés Robin Van Persie el brazalete de capitán, mostró desde el principio su rostro más combativo.
El club británico apretó ya desde los primeros compases. Hizo levantarse de las butacas a sus hinchas al marcar un gol, rápidamente desestimado por fuera de juego, del checo Tomas Rosicky, quien ayer estuvo muy fino tras una larga baja que le ha mantenido fuera del campo desde enero.
Lo intentaban los dos. El Atlético buscaba sus huecos. Una falta del central andaluz Juanito sobre Eboue, que le costó la amarilla al español, daba al Arsenal una ocasión notable de desnivelar. La asumió el holandés Van Persie con un tiro libre que se fue altísimo y que quedó totalmente desaprovechado.
Antes del descanso, una colisión con Sagna obligaba a Abel a sustituir al francés Sinama por Maxi Rodríguez.
Wenger dio entrada al español Mérida y Abel reemplazó al Kun por Germán Pacheco en una segunda mitad en la que se vio cómo el Atlético perdía fuelle y era el Arsenal el claro dominador del amistoso.
Pero aunque el Arsenal acosaba a su rival con toda su artillería, los hombres de Wenger no atinaban a rematar las ocasiones.
Llegó la hora de los cambios para un Arsenal cada vez más frustrado y, sobre todo, era el momento de llamar a filas a su capitán, un Cesc Fábregas que asumió el lugar del jovencísimo Ramsey en medio de una abrumadora ovación de las gradas.
Pero los goles se escabullían. La recta final del amistoso continuó dominada por un club anfitrión que claramente llevaba ya la batuta del partido pero que, paradójicamente, no atinó a rentabilizar su superioridad.
El Atlético malgastó la que fue sin duda su mejor ocasión en todo el encuentro, en el minuto 82 de partido, con un intento fallido de Maxi a pase de Borja Bastón.
En los últimos compases hubo tres goles en 4 minutos de encuentro. El primero del ruso Andrey Arshavin. La réplica, de la mano del suplente Pacheco para deleite del Atlético, y la palabra final de nuevo con una acción letal del jugador ruso que dio la victoria a los locales.
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