Tenía que pasar. La posición unitaria de Andalucía reivindicando tanto el corredor ferroviario central como el mediterráneo ha encontrado en los últimos días una disidencia. Un grupo de empresarios de Málaga y del Campo de Gibraltar se ha pronunciado en favor del primero, el que enlazaría Algeciras con el núcleo de Bobadilla y de ahí a Antequera y Madrid para alcanzar,finalmente, Zaragoza y Francia por medio del proyectado túnel transpirenaico. Consideran que es la vía más directa y menos costosa frente a la que transcurre por el borde del litoral mediterráneo español. Hasta ahora, tanto la Junta de Andalucía como la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA) y otros colectivos y entidades se han pronunciado a favor de los dos urgiendo al gobierno de la nación a acometer cuanto antes la realización de estas infraestructuras. Sin embargo, es el del litoral el que está cosechando más apoyos, sobre todo, desde el ámbito empresarial constituyendo un poderoso grupo de presión con ingentes recursos económicos para su promoción. Un movimiento liderado por poderosos empresarios que ven en este corredor la mejor forma de articular el flujo de mercancías proveniente de la zona con mayor riqueza de nuestro país con el centro de Europa.
Sin embargo, la irrupción de la reivindicación del corredor central ha generado cierta inquietud entre los promotores de la otra alternativa dado que ésta última es más compleja y cara de llevar a cabo. Incluso, la zona afectada del otro corredor, por el centro de la península, cuenta con menos servidumbres y sería más fácil de implementar. A pesar de que esta tesis es defendida por colectivos menos significativos, lo cierto es que solo basta con echar un vistazo a los medios informativos del Levante español para darnos cuenta del nerviosismo surgido ante la posibilidad de que el Ejecutivo de Rajoy se incline por priorizar el que va por Madrid. Todo puede pasar. De hecho, los del corredor Mediterráneo preparan un gran encuentro empresarial en Algeciras para primeros de Abril que se puede interpretar como una demostración de fuerza ante las autoridades competentes. La verdad es que a los portuarios algecireños no les hace gracia alguna que para llevar un contenedor hasta el centro de Europa tengan que hacer un recorrido por todo el litoral español cuando puede llegar a las redes transeuropeas más rápidamente a través de la capital de España.
A Andalucía le interesan las dos fórmulas que, además, son contempladas por la Unión Europea. Pero da la impresión de que estamos ya en una fase crítica en la que se deben ir cristalizando las prioridades que se consideren más convenientes.Y eso supone estar muy atentos para que los intereses de nuestra tierra no queden relegados en favor de otros que se pueden estar moviendo con más ventajas y recursos cerca de aquel que tiene que tomar las decisiones correspondientes.
