La próxima presentación de productos de Apple ha sido noticia. El gigante de Silicon Valley ha anunciado que presentará nuevos modelos de iPad y ordenadores Mac el 30 de octubre en el distrito de Brooklyn, Nueva York. Sin embargo, ha revelado un dato que llama la atención: Los nuevos iPads heredarán las características de los últimos iPhones, incorporando el reconocimiento facial en las tablets por primera vez. ¿Avanzamos, entonces, hacia la estandarización de esta tecnología en dispositivos móviles?
Counterpoint predice que más de un billón de smartphones incluirán reconocimiento facial en los próximos dos años. Desde que los científicos empezaron a trabajar en el desarrollo del reconocimiento facial a mediados de los 60, esta tecnología ha recorrido un largo camino, pasando de ser un software exclusivo de las agencias de seguridad a una tecnología que pronto todos tendremos en la palma de nuestra mano.
El reconocimiento facial es una categoría de software biométrico – igual que los sensores que detectan nuestra huella o los escáneres de retina – que mapea matemáticamente las características faciales de una persona y almacena los datos como si fueran una impresión facial. El programa usa algoritmos de aprendizaje profundo para comparar una captura en vivo o una imagen digital con la impresión facial almacenada para comprobar la identidad de una persona.
Se trata de otro caso de implementación de inteligencia artificial avanzada, una disciplina que ya hemos visto aplicada en los coches inteligentes de Tesla y en el RankBrain, el sistema mediante el cual
posiciona las webs en Google, por ejemplo.
En el caso de Apple, todo empezó con los sensores de huellas dactilares que se incluyeron en los últimos modelos de iPhone para permitir el desbloqueo del dispositivo tan solo colocando nuestro dedo sobre su único botón. En noviembre de 2017, los de la manzana sacaron al mercado el iPhone X, un smartphone que ha reemplazado el sensor de huellas por un sistema de identificación facial 3D, llamado Face ID. Se trata de una función de reconocimiento facial que genera un mapa digital en 3D de la cara del propietario del iPhone haciendo uso de más de 30,000 puntos infrarrojos y datos de hasta 50 expresiones faciales.
Siendo ya el reconocimiento facial 2D una funcionalidad nativa en el sistema Android, los analistas de Counterpoint, predicen que más proveedores de teléfonos inteligentes, incluidos Samsung, Huawei, Xiaomi, OPPO y Vivo, seguirán los pasos de Apple y adoptarán cada vez más la tecnología de reconocimiento facial 3D para permitir el desbloqueo del teléfono y la autorización de pagos en aplicaciones.
A pesar de que el boom de tecnología tiene el foco en los dispositivos móviles, también hay otras industrias que se están beneficiando de ella. En el campo de las redes sociales, Facebook, el otro gigante de la bahía hace tiempo que la implementó para proponernos sugerencias a la hora de etiquetar personas en nuestras fotografías. También las tiendas la están incorporando con el objetivo de evitar el crimen y la violencia y, con ella, los aeropuertos están mejorando la comodidad y seguridad de los viajeros. De hecho, el aeropuerto de San José, situado en el corazón de Silicon Valley, ha sido el primero en la costa oeste que se ha comprometido a usar esta tecnología para facilitar la llegada y salida de viajeros internacionales.
Recientemente, los medios se han hecho eco de la nueva propuesta de RealNetworks, una de las compañías líderes en software de medios digitales, la cual ha ofrecido tecnología gratuita de reconocimiento facial a más de 100,000 escuelas K-12 en los Estados Unidos.
Sin embargo, parece que cada vez que se habla de reconocimiento facial surge una preocupación inmediata por la privacidad. De hecho, existe una preocupación genuina de que la tecnología podría convertir nuestra sociedad en un "Gran Hermano", una sociedad vigilada que eliminaría aún más nuestra privacidad.
China podría liderar el camino en el desarrollo y distribución de sistemas de reconocimiento facial, pero aunque la tecnología ha acumulado algunos éxitos de seguridad clave, también ha sido utilizada para avergonzar a los peatones imprudentes y rastrear el movimiento de ciertos grupos minoritarios. No es de extrañar, pues, que exista una preocupación general por el estado de la vigilancia y el reconocimiento facial.
Según Brad Smith, presidente de Microsoft: “Esta tecnología puede catalogar tus fotos, ayudar a reunir familias o potencialmente ser mal utilizada y abusada por compañías privadas y autoridades públicas por igual.”
Las palabras de Smith transmiten claramente la idea de que la tecnología de reconocimiento facial es una herramienta poderosa que necesita regulación y control. Aún está por ver cómo evolucionará en este aspecto.