Exigían imperativamente la luna hasta que cayeron en la cuenta de que no estaban hechos para vivir tan lejos de su zona de confort y, de vuelta a la tierra, transformados en candidatos, metidos en harina de costal, impelidos por el guion de la campaña, se conformaron con asaltar las farolas. Caretos de candidatos, en banderolas imposibles que enrolla malamente el viento impertinente de mayo. En ello consiste, en esencia, una quincena en la que todos, sin distinción, van de primera comunión: el blanco inmaculado de no haber roto un plato. La inminencia en la renovación de los ayuntamientos, por lo general, hoy, les condiciona el ánimo.

La izquierda, a la izquierda del PSOE, afronta el 26M fragmentada en dos mitades. El modelo ‘Adelante Andalucía’, la suma de los anticapitalistas de Teresa Rodríguez y la Izquierda Unida de Antonio Maíllo, que se estrenó en las autonómicas del 2D, va camino de convertirse en organización política autónoma, de ámbito regional, ahormada como confluencia andaluza de Podemos. El ‘Adelante’ con que concurre el proyecto a estas municipales ha generado candidaturas alternativas donde se refugian, sobre todo, gente de Podemos de sensibilidades distintas a la ‘anticapitalista’, errejonistas y pablistas, mayormente. Lo que ha ocurrido en la ciudad de Jaén, con la conformación de la candidatura de ‘Sentido y Común’ –amalgamada por veteranos referentes de la izquierda local-, se extrapola como alternativa electoral municipalista a la marca ‘Adelante’. En otros pueblos, Podemos e IU presentan listas por separado, casi por cabezonería, teniendo que completar algunas con forasteros. La izquierda, a la izquierda del PSOE, aun así, presenta menos listas que nunca en la Jaén rural, donde se recupera una oferta electoral con sólo dos opciones: PSOE y PP. Quieren acabar con el bipartidismo pero en muchas poblaciones les faltan vocaciones.

El otro gran fenómeno socio-patológico al que asistimos en esta campaña de elecciones municipales en la provincia es la irrupción, despampanante, de una cualificada casta tecnócrata, procedente de organizaciones patronales, de la mano de Cs, encabezada por el gerente de la Cámara de Comercio de Linares, Raúl Caro, aspirante a la alcaldía, y reforzada por el ‘5’ naranja de Jaén, el conocidísimo Bruno García, sempiterno secretario general de Comercio Jaén. Recuérdese que la cabeza de lista al Parlamento andaluz, Mónica Moreno, provenía de AJE Andalucía. En un segundo estadio de fichajes, opositor a alcalde de su pueblo, el partido de Albert Rivera ‘pesca’ en el colectivo de asesores fiscales-laborales con oficina abierta en la localidad, caladero asiduo de los dos grandes. A la postre, poco más de 30 listas naranjas en el conjunto de la provincia siguen antojándose pocas. Marián Adán, flamante diputada nacional, responsable provincial de Implantación, ex militante del PP de Quesada hasta hace apenas medio año, sin ir más lejos, cuñas de la misma madera, fue incapaz de hacer lista en su pueblo de adopción.

Cada cual, en todo caso, convive como puede con sus propios fantasmas. Los del PP de JD Requena, por ejemplo, obsesionados desde el 2D con la fuga de votantes hacia Vox, atenúan esta vez la alarma puesto que la formación ultra sólo se ha presentado en 12 municipios jienenses. Nadie de la dirección provincial, por cierto, arropó a Cuqui en el acto de presentación de su candidatura. A Márquez y Requena, a estas alturas, sólo les une la defensa pública de la presunción de inocencia del acorralado Fernández de Moya. Y si en la capital dividida aparece la izquierda, a la izquierda del PSOE, de los reinos de taifas de la derecha cainita podría escribirse un tratado sobre la virtualidad del ‘divide y vencerás’: del Vox de Salud Anguita (‘ex’ de Cs) al Contigo de Carlos García (‘ex’ de Vox), pasando por Libres de Víctor Santiago (‘ex’ de Cs) o el Proyecto Liberal Español del Ramón Quesada (‘ex’ del PP y de Vox), y me dejo algunos.

El sanchismo, por su parte, como bien es sabido, no toca bola en listas y se siente ante el reyismo atrapado en una foto fija del pasado. Paco Reyes, liderazgo indiscutible, cuando tenga que ser, ni un minuto antes, ni un minuto después, será tan sanchista como el que más. María Jesús Montero, nada es casual, hará campaña del ‘26M’ en Jaén. Más sanchistas que cualquiera. El reyismo, alquimia fina, pone una vela a Dios y otra al diablo: Felipe Sicilia, en Ferraz, aspirante a la portavocía en el Congreso, y Ángeles Férriz, en San Vicente, portavoz regional del partido. ‘Campeones’, en porcentajes de voto en las dos últimas citas con las urnas, para el reyismo, las municipales (y europeas), que se celebrarán dentro de dos domingos, constituyen la reválida del alumno aplicado. Entre el notable y el sobresaliente. Y de primera comunión.