De ser preguntado un hombre actual por si él ayuda en las rutinarias tareas domésticas y además echa una mano con el cuidado de los hijos, la respuesta suele ser afirmativa en la mayor parte de los casos. Pero entre el dicho y el hecho se halla el trecho que se encuentra en si esa misma pregunta se le formula a las mujeres. Dicho de otro modo: Los hombres comienzan a echar una mano en lo que fue un tradicional trabajo de la mujeres amas de casa y madres antes de la incorporación de éstas al mercado laboral, pero la situación aún dista mucho del ideal del reparto igualitario de este tipo de labores.

Del estudio La mujer española ante la maternidad realizado por la empresa Philips Avent se desprende que casi la mitad de las madres (48%) cree que los hombres deben colaborar más las tareas del hogar.

El informe, que busca los cambios en las costumbres de las madres españolas de hoy respecto a las de hace un cuarto de siglo, concluye que “la actitud de las madres hacia el cuidado del bebé no ha variado en lo esencial: la salud del bebé está por encima de cualquier otro factor”, según explicó Gonzalo Condés de Bethencourt, de Philips Consumo y Estilo de Vida.

La gran diferencia de la madre actual frente a su progenitora es el paso de la “madre profesional” a la “madre trabajadora dentro y fuera de casa”. Además, se aprecian otros factores de diferenciación: la incorporación del padre al cuidado del bebé de forma fiable y satisfactoria; la abuela sigue siendo importante pero ya no es el soporte vital y único; el médico adquiere mayor protagonismo en el cuidado de los bebés y la sociedad de hoy es más abierta, con menos tabúes y mayores fuentes de información.

Concretamente, el estudio, elaborado por la Consultora ASAP en fase inicial con entrevista a doce mujeres de 25 a 35 años y sus madres y en segunda fase con preguntas a 400 mujeres también de 25 a 35 años del ámbito rural y urbano de todas las comunidades autónomas, concluye que, aunque muchas madres de hoy crea que los hombres deben colaborar más, el 37% confía más en la abuela, concretamente su madre, que en su pareja y reconoce (36%) que no siempre deja a su pareja que le ayude.

Casi la totalidad de las madres (94%) piensa que los padres de hoy se involucran en las tareas diarias de forma responsable y fiable.

Las colaboraciones más frecuentes del padre se producen en el ámbito del aseo y del baño de los niños, así como en el vestido, con el consiguiente cambio de pañales, ya que un 45% de los padres colaboran ene estas tareas. Con idéntico porcentaje están los progenitores que se llevan a sus hijos a dar el acostumbrado y necesario paseo por el parque.

La cifra desciende en lo referente a la comida de los pequeños, pues sólo un 38% de los padres se hace cargo de esta labor diaria y sólo un 26% de éstos acuden al pediatra o llevan al niño a la guardería.

Permiso de paternidad

Respecto al permiso de paternidad, hubiera sido una quimera para aquellos padres de hace 25 años (61%) y, tal vez por eso, a dos de cada tres madres les gustaría que su pareja lo solicitara. Sin embargo, el 15% teme que ello pueda suponga la pérdida de una promoción laboral o incluso el trabajo de su pareja.

Además, casi la mitad de entrevistadas (48%) señala que los hombres siguen esperando que sea la mujer la que sacrifique su profesión cuando se hace madre y prácticamente todas conocen el hecho de que los padres pueden solicitar permisos de paternidad, de hecho prácticamente la mitad de los padres (48%) han solicitado algún tipo de permiso con el nacimiento de sus hijos, mientras que en el otro extremo, uno de cada cuatro (24%) ni lo solicitó ni se planteó hacerlo.

El trabajo también concluye que las madres de la anterior generación miran con desconfianza el permiso de paternidad: “los hijos deben de estar sobre todo con sus madres y el padre trabajando y trayendo el dinero a casa.

El papel de los abuelos

El informe concluye que las madres prefieren dejar a sus hijos con los abuelos (86%) por motivos de confianza y económicos por delante de otros familiares, de guarderías y de cuidadoras de niños, que son las peor valoradas de todos éstos.

En tiempos en que hay que apretarse el cinturón, las madres prefieren recortar gastos de ellas mismas antes que hacerlo de los de sus bebés; aun así, el 17% de las encuestadas ha cambiado la comida del bebé, el 27% ha recortado en los gastos de la guardería y el 33% de cuidadora y el 36% reconoce que hace menos regalos a otros bebés del entorno.

Por su parte, el trabajo propone, no sin interés mercantil ,como soluciones que proporcionan libertad a las madres y ayudan a involucrar a los padres tres herramientas: el extractor de leche, el biberón y el vigilabebés. No en vano, más de la mitad de las madres actuales (52%) ha utilizado extractor de leche en algún momento de la lactancia y sólo un 26% interrumpe la lactancia por reincorporarse al trabajo.