La vigésimo segunda Copa del Rey de Aerostación, organizada por Globotur, dejó en Arcos un auténtico espectáculo en los cielos, con decenas de globos sobrevolando la bella ciudad. Tal acontecimiento, celebrado por primera vez en la localidad, despertó gran expectación entre la población, que tuvo que madrugar para asistir al despegue de los globos desde la explanada situada junto a la glorieta del polideportivo municipal. El lugar elegido no fue al azar, pues las condiciones del viento eran las idóneas en este espacio frente a otras alternativas que se barajaron inicialmente en este sentido: Los Cabezuelos y los Llanos de la Huerta. Era precisamente el viento el que decidiría qué lugar era el apropiado en este sentido.
La principal novedad de esta edición ha sido la incorporación de tripulaciones europeas, adelantaba el responsable de Globotour, Javier Benítez, con equipos procedentes de países como Hungría, Portugal, Alemania o Francia. La aerostación es, no obstante, una modalidad deportiva más conocida y practicada en el resto del continente.
El campeonato consta de dos pruebas; la llamada Prueba Liebre-Galgo consiste en el despegue de un globo diez minutos antes que el resto, y los demás globos han de alcanzarlo; en la de Dianas Físicas y Digitales, el participante ha de volar con unas coordenadas que se les marca previamente por la organización. Los globos lanzan un testigo con su numeral y según su cercanía a la diana es la puntuación obtenida.
La Copa del Rey dio inicio el pasado día 4 de diciembre en Antequera y toca fin el miércoles 8 en Sevilla, ciudad a la que regresa la prueba. Globotur solicitó en 2020 a la Federación Aeronáutica Española organizar de nuevo esta vez, ganando así su candidatura.
