El Ayuntamiento de Arcos se encuentra dando un nuevo paso en pro del patrimonio histórico con la actuación de adecentamiento de la fachada del antiguo convento de La Encarnación, adscrito a la Basílica Menor de Santa María y situada en el emblemático Callejón de las Monjas.


El edificio histórico está predestinado a convertirse en museo de arte sacro, gracias al convenio entre la Basílica Menor, el Ayuntamiento y el Obispado diocesano, aunque el principal promotor del proyecto es el párroco de Santa María, Domingo Gil Baro, quien, por cierto, en breve abandonará el cargo de párroco para marchar a trabajar a Jerez al lado del obispo. En este sentido, el alcalde de la ciudad, José Luis Núñez, le ha agradecido públicamente el tesón particular que ha depositado en el proyecto, que vendrá a exponer piezas de gran valor tanto de la parroquia como de los enseres de las hermandades, aunque la idea es crear una exposición dinámica en la que ocasionalmente se puedan admirar elementos de otras parroquias y hermandades foráneas. Si bien el proyecto expositivo está muy avanzado y montado ya en parte en el interior de La Encarnación, ahora lo más llamativo es la actuación en la fachada del edificio.


El Ayuntamiento ha confiado en la empresa local Patesa para la ejecución de los trabajos, presupuestados en unos 8.000 euros, aunque la culminación del proyecto expositivo tendría una inversión mucho más elevada.


Núñez ha apostillado la apuesta municipal por la custodia y mantenimiento del patrimonio del Arcos histórico monumental, de ahí que recordara otras actuaciones acometidas recientemente en las parroquias de San Francisco y San Pedro, así como en la iglesia de San Agustín. En esta dirección, es propósito del Ayuntamiento intervenir en breve en una serie de pequeños arreglos en la iglesia hospital de San Juan de Dios, en la calle Corredera.  


Con el museo de arte sacro o religioso de La Encarnación, el mencionado párroco deja otra huella de su paso por su ciudad natal, como explicó el alcalde, al margen, claro está, de su tarea evangelizadora durante tantos años.


Con este museo se crea además un nuevo espacio cultural e incluso turístico, pues aportaría otra oferta, según calibra el alcalde arcense.


La idea es inaugurar La Encarnación como museo de arte religioso dentro de unos meses, posiblemente en octubre próximo, aunque la fecha inaugural no ha sido confirmada por ninguna de las partes. Todo dependerá de la tarea de contenido y de los trabajos realizados en el exterior del edificio.