La preocupación, si no desesperación, de los vecinos de la barriada La Verbena de Arcos es más que manifiesta ante la terminación de la primera fase de trabajos para la consolidación de los terrenos cuyo deslizamiento ha provocado durante más de diez años graves problemas en viviendas e infraestructuras. Ahora acaba de finalizar una fase de obra ejecutada por el Gobierno de la nación con una inversión superior a los dos millones de euros, pero todo está pendiente de próximas fases por parte de la Junta, Diputación y Ayuntamiento, a razón de 1,5 millones, 500.000 y 300.000 euros respectivamente.
En la parte política, Alternativa Independiente Progresistas (Ai-Pro) ha llamado la atención sobre la situación a raíz de la marcha de la maquinaria y de los operarios de la empresa Tragsa, que ha realizado los trabajos de inyección de hormigón y sustancias específicas para la consolidación de los bloques de vivienda, lo cual, por otro lado, provocó como daño colateral la rotura de redes de saneamiento. Desde el grupo opositor, su concejal Leopoldo Pérez ha mostrado su decepción al no solaparse las fases de obra como era también consejo de la dirección de esta actuación cuyo responsable técnico es el prestigioso ingeniero Emilio Yanes.
El edil apuntaba a la preocupación de los vecinos y sobre todo recordaba que a día de hoy veintidós familias no pueden regresar al bloque de viviendas declarado en ruinas a pesar de seguir pagando en más de un caso la hipoteca. Pero sobre todo, Pérez hacía un llamamiento a las administraciones para que pongan fin a esta situación, particularmente al Ayuntamiento como institución más cercana. Posteriormente, el alcalde, Isidoro Gambín, ha replicado que los vecinos conocen de primera mano que la continuidad de los trabajos depende de la Junta, que en este sentido contempló en sus últimos presupuestos generales la partida comprometida de 1,5 millones de euros aún por ejecutar. Posteriormente, sería Diputación la que se haría con las riendas de la obra aportando medio millón, y finalmente el Ayuntamiento con 300.000 euros.
Estas fases servirían para reurbanizar el conjunto de la barriada tan machacada por las obras que han afectado al subsuelo de la ladera. Gambín ha aseverado a Ai-Pro que no ha sido él el que ha logrado las ayudas para La Verbena, apuntando en este sentido a la perseverancia del equipo de Gobierno municipal ante las distintas administraciones públicas.
Escuelas deportivas de fútbol
Ai-Pro también se ha mostrado crítico con la privatización de las escuelas deportivas de fútbol federado porque cree que el equipo de Gobierno ha dado un paso atrás respecto a su política de servicios públicos, mostrando su sorpresa porque éste haya quedado en manos de una empresa privada especializada, sin aparentemente, dice, haber un concurso público previo u otro proceso de concurrencia. Además, según explica el portavoz del partido, Manuel Erdozain, la información a las familias afectadas ha brillado por su ausencia, y se cuestiona si más de una de ellas podrá afrontar el coste de casi veinte euros mensuales por la formación de sus hijos.
Erdozain considera que la falta de transparencia en la adjudicación del servicio está a la orden del día y se lamenta a este respecto de que el equipo de Gobierno no haya explicado al Pleno el acuerdo con la empresa y las condiciones. Posteriormente, el alcalde de la ciudad, Isidoro Gambín, ha asegurado que esta medida de privatización solo afecta al deporte federado y que el resto de escuelas municipales, incluyendo las inferiores de fútbol, seguirán siendo gratuitas o que seguirán funcionando como en anteriores ediciones.
Gambín se lamenta del discurso de la oposición cuando ésta demandó en su día que las escuelas deportivas costaran alguna cantidad al usuario para así garantizar el mantenimiento del servicio y mejorarlo de cara a las competiciones y al deporte federado, a lo que hasta ahora se oponía el equipo socialista.