Serafín Núñez decía que “no era una peña, sino una piña”. Patrimonio barbateño. Recuerdos. Bailes de Nochevieja, disfraces y carrozas. El próximo 27 de febrero la peña de La Pachanga será la encargada de iniciar de forma oficial el Carnaval de Barbate 2019 con el tradicional pregón. “¡Eh! No estamos nerviosos” avisan estos peñistas con más de medio siglo de historia, que reciben este reconocimiento “con una enorme satisfacción”.
“¿Cómo estamos preparando el pregón? Eso es una incógnita. Los más jóvenes no nos dicen sobre qué va. El timón lo están teniendo ellos y nos indican lo que tenemos que hacer. Lo único que sabemos es que va representada la peña”, adelantan.
Presentes en diversos ámbitos de la localidad, como en el deportivo o cultural, también han mostrado siempre su lado más solidario con la sociedad barbateña. Pero, sobre todo, la Pachanga ha mantenido viva la llama del carnaval durante décadas. “Nos encanta que la peña esté a rebosar cada año”, reconocen. Todo comenzó cuando un grupo de amigos se reunía para celebrar la fiesta de Nochevieja, disfrazados y cantando coplas de carnaval. De la gente que los seguía, lograron incluso convertir en tradición que los barbateños acudieran disfrazados a tomar las uvas a la plaza del Ayuntamiento. Pero ¿cuál es el secreto después de La Pachanga? “La amistad. Siempre hemos sido una piña”.
Más que una peña, una familia
Una peña convertida en familia. En estos 56 años de historia, los pachangueros destacan, sobre todo,el papel de la mujer en la entidad. “Las mujeres han sido muy importantes para el quehacer de la peña. Ha sido una de las claves, y es que había mucha amistad entre ellas”. Las mujeres eran las encargadas de elaborar aquellos disfraces que tanto recuerdos les trae. Disfraces que disfrutaban en familia para llenar de color, durante años, las cabalgatas de carnaval, llegando a conquistar en repetidas ocasiones el primer premio en carrozas. Templo Romano, el Caballo de Troya, Disneylandia o la multitudinaria Olimpiada (“Con hasta pebetero”, señalan) todavía quedan en el recuerdo de los barbateños.
Ensayos
“Estamos ensayando jóvenes y mayores en la peña”. Ensayos multitudinarios que los barbateños podrán disfrutar en la víspera del día de Andalucía. Será la primera vez que una entidad sea la encargada de pregonar la fiesta. “Pedimos que vengan al pregón y que no vayan a ver el Madrid contra el Barcelona”, bromean. Una familia que mantiene abierta para su pueblo las puertas de su peña. Memoria y patrimonio de la localidad. Más de medio siglo trabajando para Barbate y su carnaval. Salve Pachanga Unida, salve pachanga inmortal.
Una de tantas anécdotas
Estos peñistas retienen en su recuerdo centenares de anécdotas. Para confeccionar uno de sus disfraces, de valencianos y falleras, tuvieron que acudir a Ceuta a comprar terciopelo negro para el disfraz masculino, ya que por la zona de Cádiz no lo encontraban. Antonio Oliva y Manolo Marín cruzaron el Estrecho para comprar los rollos de tela. Pero en la aduana no los dejaron pasar, “se creían que era contrabando”. Sin embargo, encontraron una solución: “pudimos pasar la tela a trozos. Fue un espectáculo cortar la ropa de cada uno allí en la aduana”.
