Un pionero sistema de conservación permite aumentar la caducidad del panecillo hasta el mes
El mollete de Antequera prolonga ahora su vida hasta los 30 días. Y su textura y sabor inconfundibles se mantendrán intactos durante cuatro semanas completas, gracias a un pionero sistema de envasado que permite reemplazar el oxígeno que se acumula en el envoltorio por una mezcla de gases inertes, y que ha permitido al Departamento de Investigación del Grupo Mollete San Roque pasar de los 21 días de caducidad que en su momento alcanzaron a al mes completo.
La caducidad que alcanza este panecillo con el nuevo sistema de conservación llama la atención hasta el punto de que el mollete llamado “tradicional” sólo tiene cuatro días de vida, según explica el gerente del grupo, Juan Paradas, empresa que aspira a dar el salto internacional en la comercialización de este producto tan propio de Antequera en el momento en el que adquieran rodaje en la distribución nacional. “Ahora es posible, de hecho tenemos hechos contactos puntales con Francia. No obstante, queremos cubrir bien el panorama nacional, y a medio plazo ya hablaremos de distribución internacional”, resalta Paradas, quien aclaró que este año van a aumentar en un 22% la producción de 15 millones de molletes que alcanzaron el pasado año.
La Consejería de Innovación, Ciencia y Empresa de la Junta de Andalucía va de la mano con el grupo empresarial en este novedoso proyecto de conservación, de forma que han resuelto positivamente la concesión de un incentivo por valor de 101.000 euros que permitirá a la compañía sufragar ciertos costes de investigación y experimentación para mejorar su comercialización. “Esta orden de incentivos que concede Innovación a través de la agencia IDEA permite a las empresas andaluzas ser más competitivas y Mollete San Roque es un ejemplo de ello”, detalló la delegada de Innovación, Pilar Serrano, durante una visita a la fábrica.
Lo que diferencia a este método de conservación del congelado es la posibilidad de mantener inalteradas las propiedades del mollete, que llega fresco y con todo su sabor ahora hasta las cuatro semanas. “Queremos empezar a comercializarlo con esta nueva caducidad desde ya”, detalla Paradas, quien adelanta que tienen previsto cerrar el ejercicio con una facturación de tres millones.