Los enfermeros y fisioterapeutas de la provincia han dicho basta ya después de dos años de lucha contra el Covid y la rabia e impotencia de lo poco que importan a la Junta de Andalucía. Este jueves, el Sindicato de Enfermería (Satse) dio inicio a un calendario de movilizaciones para reclamar al presidente autonómico, Juanma Moreno, que no abandone a su suerte a los profesionales y a la Atención Primaria, que sufre especialmente el caos provocado por la crisis sanitaria y decisiones políticas no acertadas.
Jose Antonio Alconchel, secretario de Acción sindical, aseguró a las puertas del centro de salud de Loreto, en la capital gaditana, donde se celebró una de las concentraciones convocadas en diferentes consultorios de la ciudad, que, “pese al momento caótico” provocado por la pandemia, “se despiden profesionales, mientras que se ha tenido que echar mano de militares para llevar a cabo la campaña de vacunación”.
Además, la Junta de Andalucía plantea un plan de refuerzo de la Atención Primaria, con horario de tarde, pero con la misma plantilla que, de por sí es insuficiente. No en vano, Satse calcula que, en ta situación crítica, cada enfermero tiene asignadas unas 2.500 personas. “¿Cómo vamos a ofrecer una atención segura y de calidad?, se pregunta.
Igualmente, censura que la Administración haya hecho recaer en el usuario los cuidados, desde el test, para determinar un positivo, hasta la comunicación oficial.
Alconchel reclama inversión para poder atender a cada persona de manera presencial y como merecen y, al tiempo, reactivar los programas de prevención y promoción de la salud, así como de hábitos saludables y de control de los usuarios aquejados de enfermedades crónicas.
El sindicato continuará con nuevas protestas, con la vista puesta también en el ámbito regional y provincial. La frustración es tal que incluso no descarta una huelga general.
