Los mayores de 60 pierden el miedo a divorciarse
Muchos se casaron jóvenes y por la Iglesia, convencidos, entonces, de que era para toda la vida. Hoy, superados los 60, le han perdido el miedo al divorcio, y prueba de ello es que, en los últimos años, no han parado de crecer las rupturas matrimoniales entre los que ya están jubilados.