Según fuentes de ese grupo consultadas por Efe, que cuenta con 48 diputados sobre los 135 del Parlamento catalán, la principal incógnita en estos momentos es cómo actuarán una decena de diputados de la federación nacionalista que no han aclarado cuál será el sentido de su voto.
Por otra parte, dichas fuentes calculan que entre “ocho y diez diputados” de CiU son protaurinos y que gran parte del grupo se inclinará por acabar con las corridas de toros.
Así, este grupo considera que sería una “gran sorpresa” que el bloque taurino sumara más apoyos que el antitaurino, más aún cuando dos diputados de CiU de las tierras del Ebro partidarios de los festejos taurinos ya han anunciado que no participarán en la votación.
Se trata de Francesc Sancho y de Xavier Pallarés, molestos con la decisión del PP catalán de pedir un dictamen sobre la regulación de los correbous (festejos taurinos sin muerte del animal) al Consejo de Garantías Estatutarias, lo que ha impedido que esta normativa se pueda aprobar esta legislatura.
En el otro gran grupo de la Cámara, el del PSC-CpC, que cuenta con 37 diputados, la impresión es que el resultado de la votación de no se apartará mucho de la de diciembre, cuando 67 diputados apoyaron la ILP, 59 votaron en contra, hubo cinco abstenciones y cuatro diputados no participaron en la votación.
Aunque fuentes del PSC dan por supuesto que gran parte de sus diputados votarán a favor de las corridas de toros, fuentes de Ciutadans pel Canvi consultadas por Efe apuntan que sus cinco diputados se inclinan por abolir las corridas de toros, o que, al menos, ese es el sentir puesto de manifiesto en las discusiones internas de esta asociación cívico-política.
Por ello, el PSC-CpC atribuye la responsabilidad de una hipotética prohibición sobre el presidente de CiU, Artur Mas, que dijo, recuerdan las fuentes, que su grupo estaba “dividido al cincuenta por ciento”.
Con veinte diputados de la federación CiU a favor, recuerdan estas fuentes, la prohibición de las corridas no podría salir adelante.
Precisamente, los grupos parlamentarios trataron ayer, en las reuniones preparatorias del pleno que comienza esta tarde, la votación de la ILP, que ha despertado expectación en España y en el extranjero.
Si en diciembre se optó por una votación secreta, ahora todos los grupos se han comprometido en hacerla pública, con lo que se podrá saber qué ha votado cada diputado.
A diferencia de lo que sucede con los grupos mayoritarios, no existen dudas sobre el voto del resto de formaciones: el PP catalán, con 14 diputados, y el grupo mixto, con tres diputados, votarán a favor de las corridas de toros, mientras que ERC, con 21 escaños, e ICV-EUiA, con 12, se inclinarán por prohibir este tipo de festejos.
Los populares catalanes no dan la batalla por perdida, y confían en que, para apurar al máximo todas las opciones, se imponga en el PSC la disciplina interna a favor de las corridas de toros.