La Diputación de Cádiz ha celebrado un Pleno Institucional, en el marco del programa ‘45 años, 45 municipios’, para rendir homenaje a los hombres y mujeres que han formado parte de las corporaciones provinciales desde 1979. “Que las nuevas generaciones sepan que la democracia que disfrutamos se levantó sobre los cimientos, la generosidad y el sacrificio de esos hombres y mujeres a los que queremos recordar”, ha señalado la presidenta, Almudena Martínez, en su intervención.
Y no resultó fácil, ha apuntado, porque, tras aquellas elecciones, ediles y alcaldes se enfrentaron a la dura realidad municipal. “Faltaban equipamientos sociales, culturales y deportivos" y las infraestructuras básicas, como “el saneamiento, eran calamitosas”, afectando sobre todo a “muchas zonas rurales”.
La presencia de la mujer fue residual. De más de 8.000 alcaldías en España, “sólo 99 mujeres llegaron a ser alcaldesas, ninguna de ellas en la provincia de Cádiz”, ha recordado, hasta 1987, cuando Eulalia Ortega García, de CDS, alcanzó la Alcaldía de Villaluenga.
Ortega, ha remarcado, y otras tantas concejalas en las elecciones posteriores “abrieron el camino en política para muchas otras mujeres en la provincia”.
Todos estos, en definitiva, han facilitado el “desarrollo de nuestros pueblos y ciudades en la democracia”, ha agregado, y ha reivindicado “a los servidores de la política de proximidad que marcan la diferencia en la vida de la gente y que aceptan su responsabilidad incluso sin cobrar”. Por ello, para reconocer y valorar la figura de estas personas, ha anunciado la instauración del premio de la Diputación al Concejal o Concejala de Pueblo, que se concederá con periodicidad anual.
Martínez también ha reivindicado el papel de la Diputación durante estas cuatro décadas y media. “Cádiz ha experimentado una transformación desde todos los puntos de vista: económico, social, político, cultural, educativo, cultural”, respaldada por “la asistencia, los servicios y el esfuerzo inversor de la institución provincial, que hoy disfruta del presupuesto más alto y más social de su historia”. No en vano, en 1979, las cuentas ascendían a 4.000 millones de pesetas y hoy a 338 millones de euros.
Asimismo, ha defendido “la cogobernanza con otras administraciones” frente al debate competencial”. "Debemos ser más eficientes y eficaces", y para conseguirlo, la institución está inmersa en la transformación digital de la administración”, y afronta “un nuevo ciclo” basado en “la alianza con otras administraciones y con los agentes sociales y económicos locales", entendiendo que la colaboración público-privada es "llave para el progreso de la sociedad, sus habitantes y el tejido productivo”, ha añadido.
Finalmente, ha renovado su compromiso “por el interés común de Cádiz con determinación y desde nuestra autonomía, la que nos otorga la Constitución Española en su artículo 137, prestando servicios a los municipios y, por extensión, a los gaditanos y las gaditanas”.