En su informe anual de 2010, la JIFE afirma, utilizando datos del Observatorio Europeo de las Drogas, que la prevalencia anual del consumo de cocaína en España es del 3,1% entre la población de 15 a 64 años.
España supera así al Reino Unido, donde el uso de cocaína alcanza el 2,4%, y a Italia, con el 2,2% de la población de la citada franja de edad, mientras que la prevalencia media en toda la Unión Europea es del 1,2%, según este órgano independiente de la ONU que vigila el cumplimiento de convenios internacionales sobre drogas.
Aunque la prevalencia del consumo es mayor en España, el Reino Unido sigue siendo en términos absolutos el país donde más consumidores de cocaína hay en Europa debido a su mayor población, según los últimos datos de la Oficina de la ONU contra la Droga y el Delito (Onudd).
Según la distribución de consumidores de cocaína en Europa, al Reino Unido le corresponde el 23% de los adictos europeos, a España el 21%, a Italia el 19%, a Alemania el 9% y a Francia el 5%, acorde a un informe de la Onudd de 2010 con datos de 2007 y 2008.
La cocaína es la segunda droga que más se consume en Europa después del cannabis, y su uso en el continente se ha duplicado al pasar de los dos millones de adictos en 1998 a los 4,1 millones en 2008, según la JIFE.
“El abuso de cocaína se está propagando desde Europa occidental a otras partes del continente. En algunos países, su consumo puede estar sustituyendo al de anfetaminas y éxtasis; por ejemplo, en Dinamarca, España y el Reino Unido, el aumento del consumo de cocaína coincidió con disminuciones en el nivel de abuso de anfetaminas”, según indica el informe.
España es también uno de los grandes puntos de entrada de la cocaína en Europa y es responsable de la incautación en aduanas de más del 50% de esa droga que llega al viejo continente.
De las 34,9 toneladas incautadas en 2009 en Europa, España intervino casi 18 toneladas, aunque en toda Europa ha bajado el nivel de decomiso de esa droga, según la Junta.
España también es el principal país mundial en cuanto a incautación de resina de cannabis. El año pasado se intervinieron 27 toneladas de resina de cannabis en las aduanas marítimas y en las playas, y el 93% de esas sustancias procede de Marruecos.
Además, España es uno de los países citados por la JIFE por haber disminuido el consumo de cannabis, aunque no ofrece datos detallados sobre esa evolución.
La JIFE elogia por estas medidas “el firme compromiso de España” con los tratados internacionales contra la droga, pero muestra “su preocupación” porque “siga habiendo en España 'salas de consumo de drogas'”, en referencia a las salas de venopunción.