Una tarde de domingo supone el momento ideal para poder disfrutar contemplando un partido de fútbol del equipo de tus amores si de balompié se habla. Si por el contrario, lo que se busca es el vandalismo, la trifulca, la guerrilla urbana y la delincuencia común, también puede darse con la excusa de un encuentro del deporte de los once contra once.
Y eso sucedió ayer por la tarde en la capital gaditana. Algo previsible, pues cuando en la coctelera del fútbol se ponen como ingredientes Xerez y Cádiz siempre queda algo de resaca, no en vano, desde Jerez el Cuerpo Nacional de Policía enviaba unidades de la UPR en previsión de lo que finalmente pasó.
Por un lado quienes pretendían ver el último partido de la temporada en la Segunda División Provincial, octava categoría del fútbol, entre el Cádiz 1812 FC y el Xerez Deportivo, intrascendente en cuanto a la tabla clasificatoria, ya que el primero pisaba el campo sin aspiraciones y el segundo, primero de la categoría y ascendido hace ya varias jornadas.
En el otro lado estaban algunos individuos salidos del grupo de seguidores del equipo jerezano, los cuales y bajo el abrigo de la bandera del grupo radical Kolectivo Sur, se acompañaron para la visita a la Tacita de Plata por algunos distinguidos seguidores del también grupo ultra del Sevilla FC, los Biris.
En total unos 30 o 40 tifosi de entre los cuales, estima la Policía Nacional, que "unos ocho o diez" se pasearon por el Cerro del Moro rompiendo todo cuanto encontraron a su paso con utensilios tan pacíficos en sus manos como bates de béisbol y cosas similares. Coches, motos y mobiliario urbano fueron presa fácil para unos energúmenos los que no les mueve lo más mínimo el deporte y sí el daño. Algo que traerá como consecuencia una investigación ya en curso y que es de desear que dé como resultado la detención de los autores.
Lo que no esperaban estos descerebrados fue la pronta actuación de los vecinos, que en bloque acudieron a plantarles cara y lograron ponerlos a la fuga, para más tarde interponer no pocas denuncias ante la Policía Nacional.
La Policía actuó antes del inicio del choque en zonas aledañas al lugar del encuentro, el campo Manuel Irigoyen, en evitación de enfrentamientos entre hinchadas de ambos bandos, algo que no llegó a evitar, pues testigos presenciales han señalado a este medio que hubo más cera de la aconsejable, y hay vídeos que así lo atestiguan. La Policía Nacional continúa con la investigación abierta y no ofrece más datos, ni sobre la existencia o no de detenidos.
El intrascendente partido acabó con victoria visitante por 0-3, algo que a los primates de los bates ni les va ni les viene.
