Un agente de la Policía Local de Cádiz, adscrito al servicio de Atestados de la Jefatura Local de Cádiz, fue detenido por su presunta relación con un caso, que permanece abierto, contra la tenencia y distribución de pornografía infantil, según fuentes policiales.
Todo comenzó con una investigación de la Unidad Central de Delitos Tecnológicos de la Comisaría Provincial de Madrid centrada en una nueva red de tenencia y distribución de material audiovisual de pornografía infantil. En el marco de dicha operación, los agentes encargados de la investigación siguieron el rastro de una dirección de Protocolo de Internet, IP (siglas en inglés), que los trasladó hasta la capital gaditana.
Una vez en Cádiz, los agentes de la Unidad Central de Delitos Tecnológicos de Madrid solicitaron la colaboración de sus compañeros de la Comisaría Provincial de Cádiz, los cuales, una vez identificada el propietario de la IP, siendo éste presuntamente un agente de la Policía Local, procedieron a su detención. Para ello acudieron hasta su trabajo en la Jefatura de la Policía Local de Cádiz donde realizaron la detención del citado agente, según indican las mismas fuentes.
Tras su detención, señalan las fuentes policiales, se le tomó declaración y posteriormente se le puso en libertad, al parecer con cargos, en espera de la que concluya la investigación y de saber por ende los posibles delitos que se le atribuyen. Según ha podido saber este medio, el agente estaría de baja actualmente, aunque algunas fuentes hablan de depresión otras señalan que estaría de baja como medida cautelar hasta saber la gravedad del asunto, por lo que habría sido apartado del servicio hasta que concluya la investigación y saber igualmente qué determina la autoridad judicial.
Actualmente, según fuentes policiales, la Unidad Central de Delitos Tecnológicos está centrada en el análisis de todo el material informático incautado para la investigación. Se trataría de su ordenador personal, su móvil y diferentes discos duros donde supuestamente almacenaría el material pornográfico infantil. Una vez que se analicen se verá si se encuentran pruebas que lo incriminen o que demuestren su inocencia. De ahí la prudencia que rodea a este caso.
La investigación llevada a cabo desde Madrid sigue abierta en los próximos días la Policía Nacional dará cuenta de ella y se sabrá el número de personas investigadas en este nuevo caso de pornografía infantil.