Un juzgado de lo Social de Cádiz ha determinado que fue ajustada a derecho la sanción de más de dos millones de euros que el Ministerio de Trabajo impuso a la Fundación Universidad Empresa (FUECA), última de las entidades que ofreció formación remunerada a los exempleados de Delphi.
Según han informado fuentes jurídicas, el juzgado ha rechazado la demanda interpuesta por FUECA contra la sanción que se le impuso por establecer con un sistema irregular de simulación de contratos laborales la relación con los 416 extrabajadores de Delphi que siguieron cursos de formación remunerada.
FUECA agotó las vías administrativas para recurrir esta sanción y después acudió a la vía penal con una demanda que ha sido ahora rechazada y en la que alegaba que en el sistema de contratación que se estableció intervinieron los representantes sindicales de los extrabajadores, los propios extrabajadores y la Junta de Andalucía, por lo que entendía que eran también actores y responsables de esta situación.
La sentencia, según las mismas fuentes, argumenta que FUECA tenía mecanismos suficientes con los que debería haber sabido que estaba cometiendo una irregularidad por lo que entiende que la sanción que se le impuso es legal.
El secretario de la Federación de Industria, Construcción y Agro de UGT en Cádiz, Antonio Montoro, ha calificado como una "buena noticia" para los extrabajadores de Delphi esta decisión judicial.
"Demuestra que, en ningún caso, el colectivo de Delphi tuvo nada que ver con la responsabilidad que se le pedía y es un paso más para dar tranquilidad y dejar claro que el colectivo de exoperarios no tuvo culpa de nada", ha asegurado.
Esta sentencia es independiente de la que deparará el juicio, previsto para el próximo año, en el que el Servicio Estatal Público de Empleo SEPE reclama que se anulen los años cotizados por los extrabajadores de Delphi que siguieron estos cursos remunerados, con lo que quedarían borrados de su vida laboral y del cómputo para su jubilación.
Pero el representante sindical cree que esta sentencia ayudará a los extrabajadores en este otro proceso.
"Deben ser los jueces los que establezcan quiénes fueron los responsables de lo ocurrido, si fueron las empresas aseguradoras, la Junta o quien fuera, pero nunca los extrabajadores", ha dicho.
FUECA fue la última de las entidades que impartió cursos de formación remunerada a los 416 extrabajadores de Delphi que en 2009 seguían sin encontrar trabajo y habían agotado el subsidio de desempleo.
En 2013, un año después de que acabara esta formación, la Inspección de Trabajo alertó de que había irregularidades en el mecanismo de contratación, en un informe en el que advirtió de que "un desempleado no puede recibir un sueldo que suponga cotización y posible percepción de un posterior subsidio por desempleo por asistir a un curso formativo".
Por ello, se consideró que había habido una simulación de contrataciones y el SEPE sancionó a las fundaciones y empresas que impartieron esta formación.