La nave con sus siete tripulantes descendió sobre la pista del Centro Espacial Kennedy en Florida a las 14.48 GMT, exactamente la hora prevista, tras disiparse una leve amenaza de lluvias sobre la región.
El aterrizaje se produjo sin ningún contratiempo y la nave tomó tierra limpiamente.
“Endeavour, bien hecho. Ya están de regreso en casa. Enhorabuena por una misión muy bien llevada a cabo”, dijo el control de la misión en el Centro Johnson de Vuelos Espaciales de la NASA en Houston (Texas). “Gracias a todos ustedes. Hemos hecho nuestro trabajo y eso es de lo que se trataba”, contestó el comandante Mark Polansky.
En el curso de su misión, los tripulantes del transbordador sustituyeron seis baterías del complejo espacial y entregaron vituallas y equipos a sus seis ocupantes, además de ajustar piezas y sistemas del complejo.