El concejal de Medio Ambiente, Álvaro de la Fuente, acompañado de los niños y niñas bielorrusos del Programa de Acogida y Saneamiento Temporal de la hermandad de la Vera Cruz de Cádiz y de miembros de esta hermandad han descubierto hoy una placa conmemorativa e identifica del que han llamado ‘El árbol de la vida’.
Se trata de un palmera Washingtonia filifera que plantaron en el Parque Genovés el 1 de agosto de 2011 los jóvenes que en ese momento se encontraban en la ciudad participando de este programa.
El concejal de Medio Ambiente, Álvaro de la Fuente, ha explicado que con este acto se quiere reconocer el trabajo y la labor que se realiza dentro de este programa para mejorar las condiciones y la calidad de vida de los niños y niñas de Bielorrusia. En este sentido ha reconocido y agradecido el trabajo que realizan los distintos colectivos y entes como la parroquia de San Lorenzo y la asociación Aguaores Blancos además de la hermandad.
Esta palmera ha pasado a llamarse ‘el árbol de la vida’ para simbolizar la contribución por paliar las desastrosas consecuencias que sobre la población bielorrusa tuvo el accidente nuclear de la Central de Chernobyl en la República de Ucrania, en abril de 1986.