Aunque poniendo por delante que se trata de “una barbaridad”, el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, realizó ayer un balance positivo de la evolución de las muertes en accidente de tráfico para este año, y van ya cinco concecutivos, al estimar que 2008 acabará con 2.300 fallecidos, 500 menos que el año pasado. Rubalcaba cree que en este éxito ha influido el cumplimiento “punto por punto” de los planes de seguridad vial, y se comprometió a que antes de que cabe la Legislatura los agentes que controlen la seguridad vial alcancen los 11.000.
El ministro del Interior pronosticó ayer que cerca de 2.300 personas fallecerán este año como consecuencia de accidentes de tráfico, 500 menos que en 2007, y, aunque calificó el dato como “una barbaridad”, destacó que 2008 “será el quinto año consecutivo con descensos” en el número de víctimas en las carreteras españolas. Pérez Rubalcaba acudió a la presentación de un seminario organizado por la Organización Internacional de Policías de Tráfico (Tispol) que reunió en Madrid a las policías de tráfico de 17 países europeos para tratar de obtener un planteamiento integral en materia de seguridad vial a nivel europeo.
El titular de Interior garantizó que el Gobierno “ha cumplido punto por punto” el Plan estratégico de Seguridad Vial 2005-2008, y dijo acoger con “satisfacción relativa y responsabilidad” los resultados conseguidos en materia de siniestralidad. “Estamos satisfechos y sobre todo esperanzados por el trabajo que tenemos por delante”, indicó. En su opinión, la reducción “significativa” en el número de fallecidos es fruto de las mejoras en las carreteras españolas, los cambios legislativos, el cambio de mentalidad de los propios conductores y el incremento del número de agentes y medios en la Guardia Civil.
En este último apartado, se comprometió a acabar la actual legislatura con 11.000 agentes de la Guardia Civil controlando el tráfico, 1.237 más de los que actualmente conforman la Agrupación de Tráfico, según destacó. Rubalcaba indicó que se “han mejorado los medios y las retribuciones” para “hacer más atractivo” la agrupación y conseguir aumentar la plantilla.
Por su parte, el director de Tráfico, Pere Navarro, afirmó que “los índices de seguridad vial pueden ser indicadores de la cultura cívica de cada país” y realizó un repaso por algunas de las medidas puestas en práctica por la DGT en los últimos años como el carné por puntos, la reforma del código penal o las distintas campañas de información.
El fiscal especial de Seguridad Vial, Bartolomé Vargas, se lamentó de que, pese a que “en lo económico exista un modelo europeo consolidado”, no ocurra lo mismo en el régimen sancionador, por lo que apostó por crear “un espacio europeo de seguridad vial”.