Los trabajos en la fosa norte de San José se retomarán en abril

Los trabajos en la fosa norte del cementerio de San José se retomarán a inicios del próximo mes de abril, una vez se apruebe el convenio de colaboración entre el Ayuntamiento de Cádiz y Cemabasa para la exhumación y localización de fallecidos fusilados e inhumados en la fosa común del patio 1º norte del cementerio de San José de Cádiz.

Será mañana lunes, 1 de abril, cuando se celebrará el Consejo de Administración de Cementerio Mancomunado Bahía de Cádiz, S.A (Cemabasa) y se abordará este asunto, entre otros.

El concejal delegado de Memoria Democrática, Martín Vila, ha informado de que en estos días se están realizando ya los pertinentes trabajos de desbroce, limpieza y resanado del terreno, con objeto de que los arqueólogos puedan trabajar cómodamente en la fosa norte del cementerio.

“La implicación de Cemabasa como empresa pública es fundamental en estas tareas, colaborando con el proyecto de intervención arqueológica. Seguimos implicados con la verdad, justicia y reparación, pese a que la Junta de Andalucía y el Gobierno Central ni aportan ni se interesan. Vamos solos desde el Ayuntamiento junto con la Plataforma de Memoria Histórica”, ha manifestado Vila, quien también ha tenido palabras de agradecimiento para la Plataforma de Memoria Histórica y para las personas voluntarias que están colaborando en las tareas y que seguirán haciéndolo.

Cabe recordar que el pasado mes de julio, el edil comunicó que se habían encontrado hasta siete nuevas víctimas con indicio de muerte violenta, cuatro de ellas en esta fosa común norte de patio 1 y tres en la sepultura 28 localizados de forma paralela y gracias a los trabajos que se vienen realizando en el cementerio desde octubre de 2017 por S.O.S. Bebés Robados en los que se comprobaron cómo en algunas sepulturas colectivas, bajos los enterramientos infantiles, se conservaban inhumaciones con una cronología más antigua que podían corresponder a la década de los 30 y 40.

Y esas víctimas se sumaban a las 16 localizadas en diferentes sepulturas verticales durante la primera fase de intervención realizada en enero de 2016 y que concluyó con la inhumación de los restos en el cementerio mancomunado de Chiclana.