La Policía Nacional ha desarticulado una organización criminal dedicada al contrabando de tabaco, que introducía desde Gibraltar y trasladaba hasta Madrid.
La mercancía era transportada a la capital en furgonetas alquiladas y, una vez allí, la distribuían a establecimientos de alimentación donde se vendía en cigarrillos sueltos.
Por el momento hay siete detenidos pero la investigación continúa abierta ya que se espera el arresto de más implicados en este entramado criminal.
Además, han sido intervenidas 75.000 cajetillas de contrabando, con un valor de casi medio millón de euros, además de seis vehículos de alta gama, dinero en efectivo y numerosa documentación.
La investigación se inició en marzo del pasado 2021, cuando los agentes tuvieron conocimiento de una organización criminal dedicada al contrabando de tabaco procedente de Gibraltar. Iniciadas las primeras averiguaciones comprobaron que el material era trasladado a Madrid a través de furgonetas alquiladas y, una vez en la capital, lo ocultaban en trasteros también en régimen de alquiler.
Adoptaban numerosas medidas de seguridad para evitar ser localizados y descubiertos por la Policía. Iban cambiando la ubicación de la mercancía por diferentes locales y para los contratos de alquiler utilizaban documentación de otros ciudadanos por los que se hacían pasar. Además, utilizaban vehículos lanzadera en el traslado de la mercancía para alertar de cualquier control o presencia policial.
El pasado mes de noviembre los agentes lograron incautarse de más de 40.000 cajetillas y detener al conductor encargado de trasladar el material a Madrid.
A raíz de este arresto, la organización cambió por completo el modo de distribuir la mercancía, comenzando a realizar los envíos a través de empresas de transporte. Los palés alcanzaban el peso de unos 400 kilos, enviando generalmente entre dos y tres paquetes.
Una vez los investigadores detectaron esta nueva forma de operar por parte de la organización realizaron un dispositivo policial a finales del pasado mes de enero, en el que lograron detener a nueve personas en el momento en el que trataban de guardar en un trastero dos palés con 30.000 cajetillas de tabaco de contrabando.
En el registro realizado en un domicilio de la localidad toledana de Illescas se intervinieron unas 75.000 cajetillas valoradas en casi medio millón de euros, cinco vehículos de alta gama, dinero en efectivo y numerosa documentación relacionada con los hechos.
Los arrestados pasaron a disposición de la autoridad judicial como presuntos responsables de los delitos de pertenencia a organización criminal, contrabando y blanqueo de capitales.
La investigación continúa abierta por el momento y no se descarta que se produzcan nuevas detenciones.