La Autoridad Portuaria de Gibraltar (GPA, en sus siglas en inglés) ha informado de la presencia de manchas de combustible residuales en las aguas que rodean el Peñón, procedentes del buque varado desde el accidente del pasado 29 de agosto, el ‘OS 35’.
En un comunicado, indican que “como cabía esperar”, tanto el domingo como el lunes se produjeron “ligeras manchas” de combustible residuales al desprenderse “pequeños restos” del buque durante las tareas para hundir la popa que tuvieron lugar el sábado.
La mayor parte de la mancha “ha sido disuelta por efecto de las condiciones meteorológicas” y, para minimizar más su impacto, la Autoridad Portuaria gibraltareña ha hecho uso de sus recursos y que reforzará las acciones cuando el oleaje disminuya.
Aunque “sigue siendo leve”, apunta, esta mañana la mancha de contaminación es algo más extensa, por lo que la GPA ha enviado más barcos para empezar a limpiarla y concentrar todos los recursos disponibles en las operaciones de limpieza.
Por eso se han detenido todas las operaciones portuarias en las que participen lanchas que puedan colaborar en la tarea.
A petición del capitán del Puerto de Gibraltar, la Capitanía Marítima de Algeciras ha enviado medios a la zona de Punta Europa para limpiar cualquier mancha que se desplace hacia la Bahía de Algeciras.
De momento “no hay ningún vertido de petróleo espeso saliendo del buque ni en el área circundante”, aclara la GPA. Tampoco hay ninguna playa afectada por el vertido.
El Ministerio de Medio Ambiente y la empresa Oil Spill Response Limited continúan realizando evaluaciones diarias de la costa con el fin de poner en marcha operaciones de limpieza en cuanto fuese necesario.
La barrera que rodea al buque se retiró, como estaba previsto, durante las tareas del hundimiento de la popa y el actual oleaje alrededor del buque imposibilita, por el momento, su sustitución, que se efectuará “en cuanto sea seguro hacerlo”.