Chiclana Natural considera importantes sus consejos de cara a la fase experimental. All-gas-oil supondrá una inversión de 11,5 millones de euros
Dos de los más prestigiosos especialistas internacionales en proyectos ambientales relacionados con el cultivo de microalgas, John Benemann y Rupert Craggs, visitaron la localidad a mediodía de ayer. Su presencia en Chiclana tuvo como objetivo ofrecer asesoramiento en calidad de consultores de cara a la puesta en marcha del proyecto de producción de biocombustible a partir de microalgas, una iniciativa que el pasado diciembre fue declarada de utilidad pública por el Pleno municipal.
“Las aportaciones de estos dos auténticos gurús de las ciencias ambientales y la ingeniería se consideran de un relevante valor técnico, especialmente de cara a la fase experimental y los ensayos previos que definirán el encauzamiento del proyecto previsto en Chiclana. No hay que olvidar que se trata de una iniciativa avalada por la Unión Europea que podría originar hasta 40 puestos de trabajos y contará con una inversión de 11,5 millones de euros”, señalan desde Chiclana Natural.
Benemann y Craggs visitaron la salina municipal Carmen de Bartivás, próxima a la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de El Torno, en la que está prevista la implantación del proyecto, e intercambiaron opiniones con los técnicos municipales de Chiclana Natural y del consorcio de empresas que participarán en la puesta en marcha de la planta de microalgas.
El fundamento técnico de este proyecto denominado All-gas-oil parte del aprovechamiento de nutrientes, cultivo de microalgas y contenidos en las aguas residuales para, a partir de ellos, aunar de forma innovadora dos aspectos: la obtención de biodiésel y otros productos de elevado valor ecológico, y la depuración de aguas residuales.
John Benemann es uno de los pioneros en este moderno sector de obtención de biocombustible a partir de algas. Comenzó sus investigaciones a principios de los setenta en el Departamento de Energía del gobierno de Estados Unidos y desde entonces ha acumulado un extenso currículo. Con un doctorado en Bioquímica por la Universidad de Berkeley (California) ha dejado su huella como investigador, profesor y consultor en las áreas de productos de microalgas, tratamiento de residuos, biocombustibles, fotosíntesis y la reducción de gases de efecto invernadero.
Rupert Craggs es un especialista neozelandés en tratamiento de aguas residuales naturales y dirige un equipo que investiga la recuperación de la energía de los sólidos de las aguas residuales para su transformación en biogás y el cultivo de algas unicelulares transformables en biocombustible a partir de los nutrientes de las aguas residuales.
No obstante, no son los primeros científicos de primer nivel que visitan la localidad para aportar su experiencia en proyectos ambientales. En 2001, el profesor de origen japonés de la Universidad de California Takashi Asano, uno de los principales especialistas en depuración de aguas residuales, visitó las instalaciones chiclaneras para conocer la primera experiencia piloto en España de reutilización y recuperación de agua usando la ósmosis inversa.