Quizá no todos hayan oído hablar de él, pero lo cierto es que Antonio Torremocha es una de las personas más cultivadas que he conocido jamás. Es historiador, conociendo al dedillo la historia de España y especializándose en el Puerto de Algeciras, también es un excelente escritor con más de una decena de novelas a sus espaldas y, por si fuese poco, a veces pasa el tiempo pintando cuadros que para nada pasan desapercibidos. Un hombre tan polifacético como lo son sus temas de conversación.
Si hay algo en lo que destaque especialmente es en su escritura, y es que Torremocha adora la historia y dar a conocer personajes y eventos que por lo general se dejan un poco de lado. Antes de escribir sus novelas hace una exhaustiva investigación sobre el periodo a tratar: "uno debe saber qué comían, por ejemplo. Puedes contar que unos soldados hacían una pausa para comer, pero no te puedes inventar qué es lo que están comiendo, y no mencionarlo tampoco es una solución."
Defendía que la fidelidad histórica es su mayor compromiso con sus obras: "el punto es que uno se divierta mientras aprende historia. Poder imaginar cómo era el mundo en aquella época y sumergirse por completo en él." Aseguraba también que no hay que tenerle miedo a internet: "la historia tiene muchas fechas, y a veces una búsqueda puede ser útil, es imposible acordarse de todo. Eso sí: uno se tiene que asegurar de utilizar fuentes fiables."
Nos hablaba con especial cariño de una de sus obras: El Héroe Traidor. La historia narra la vida de Pedro del Roncal, un joven del norte de España que, a sus dieciséis años, se cansa de ser pastor y viaja para labrarse un futuro. Así, conoce a unos marineros con los que se embarca y aprende de ellos. Así, pasa años yendo de oficio en oficio tal reputación que logra, llegado a cierto punto, convertirse en general y librar Nápoles de los franceses. Pero, ¿por qué lo llaman traidor? Bueno, tendréis que leer la novela para descubrirlo... o buscarlo en internet, tampoco es como que pueda deteneros: soy solo un texto.
Esto es, a grandes rasgos, la parte literaria de nuestro queridísmo Torremocha. Por supuesto contaré con su inestimable ayuda para otros temas más adelante, como un recorrido por la historia del Puerto de Algeciras o un tour por el castillo de Castellar mientras nos habla de su historia y secretos, aunque tampoco quiero adelantarme demasiado. Espero que, como a mí, os parezca un tipo interesante, porque de aquí en adelante tendremos más de un artículo en el que sea nuestro protagonista.