Estos cinco proyectos formativos, que irían destinados a un total de 24 alumnos en cada uno de ellos, y con un presupuesto estimado en torno a los 600.000 euros por cada iniciativa, están relacionados con temas como la jardinería y la fontanería relacionadas con los campos de golf, “un sector que demanda profesionales cualificados y que genera un importante número de empleos en Chiclana”, según Lechuga; las energías renovables; el mantenimiento y gestión de edificios, “destinado a aquellos jóvenes sin cualificación profesional relacionados con la construcción”; la reparación y montaje de electrodomésticos, “aquí hay un acuerdo con Cáritas para donarles todo lo que los alumnos reparen y reciclen durante sus prácticas”; y un último taller destinado a la formación de profesionales en la restauración.
Según el delegado de Fomento, todas estas iniciativas cuentan con el informe favorables de la Delegación que han analizado las necesidades laborales existentes. Se tratan, ha afirmado “de proyectos reales capaces de ofrecer empleos reales a los jóvenes de Chiclana”.
En este sentido, José Manuel Lechuga ha reconocido que se ha descartado presentar proyectos de difícil salida laboral en estos momentos, ya que “ahora hay que centrarse en ofrecer una formación en temas que realmente tengan una demanda laboral real”.
En cuanto a los lugares donde se realizarían estas escuelas-taller, una vez aprobados por el Servicio Andaluz de Empleo, la intención de los responsables de Fomento es que la mayoría de ellos se desarrollen en dependencias municipales, “como, por ejemplo, el de mantenimiento de edificios, en el propio Ayuntamiento, o el de hostelería, en el Hotel Escuela Fuentemar”.
